La chilena Erika Olivera anunció este domingo su retirada, a los 40 años, tras disputar el maratón de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y convertirse en la primera mujer en correr cinco veces la mítica distancia de 42,195 kilómetros,
"Es la mejor manera de retirarme", dijo la también madre de cinco hijos a enviados especiales de la prensa chilena tras completar la prueba en Rio de Janeiro, en la que llegó en el lugar 105 con un tiempo de dos horas, 50 minutos y 30 segundos.
"Estoy agradecida. Agradecida de todo Chile porque sé que me acompañaron desde Arica a Punta Arenas. Haber llegado es algo que me propuse yo", añadió la corredora, que fue también la abanderada de su país en el desfile inaugural de los Juegos.
"Es un desafío que me hice hace cuatro años y la verdad es que poder terminarlo me deja súper conforme", comentó la corredora, para quien Río de Janeiro será un recuerdo imborrable por el hecho de haberse alcanzado un récord tan especial: haber disputado el maratón en cinco juegos olímpicos.
La chilena corrió el maratón en Atlanta 1996, con el lugar 37; mejoró diez lugares, hasta el puesto 27 en Sydney 2000; en Atenas 2004 fue 58 y 64 en los Juegos de Londres 2012. Los juegos de Pekóin 2008 coincidieron con el nacimiento de una hija y no pudo estar presente.
La carrera de Érika Olivera incluye además la medalla de oro en el maratón de los Juegos Panamericanos de Winnipeg 1999 y de bronce en los de Santo Domingo 2003, además de varias decenas a nivel chileno, sudamericano o iberoamericano en carreras de 5.000 o 10.000 metros a lo largo de su trayectoria.
En su futuro, Érika no se ve alejada del deporte de sus amores. El próximo año espera terminar su carrera de Administración de Empresas y, al mismo tiempo, dedicarse a entrenadora de atletas.
"Hace años que estoy preparando gente. Me gustaría llegar a unos Juegos Olímpicos, o a varios, como entrenadora", remató.
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