Cuando abrió su refrigerador, una madre argentina se dio con la ingrata noticia que sus chocolates le fueron robados por sus hijos y esposo. Indignada por lo ocurrido, instaló una caja fuerte en la nevera para que nunca más alguien coja sus dulces favoritos sin su consentimiento.
La red para ATRAPAR delincuentes fue real: el inservible INVENTO que no podría funcionar en Perú