Una vez que el atroz viento cesó, el esquí alpino hizo su aparición al fin en los Juegos Olímpicos de Invierno. Y con ello, llegó el debut del chileno Henrik von Appen junto al boliviano Simon Breitfuss.
Pero ninguno de los dos pudo concluir lo que comenzó.
A Breitfuss se le invalidó su segunda prueba del combinado, el eslalon, por incumplir con un protocolo. Von Appen ni siquiera largó en esa competición, luego de un meritorio papel en el descenso libre.
Ambos tienen actividad por delante en estos juegos. En el caso de Von Appen, estaba pensando en la actividad futura en el Centro Alpino de Jeongseon cuando se abstuvo de disputar el eslalon, luego de obtener un meritorio 22º puesto.
Pero Von Appen sufrió un aparatoso accidente en Turín, recién dos semanas antes de emprender el viaje a Corea del Sur. En un momento, la lesión de muñeca que le dejó esa colisión puso en duda su participación en la cita olímpica.
Incluso, Von Appen reveló que ha debido amarrarse el bastón a la mano, ante la incapacidad de sujetarlo. Solo el deseo por representar a su país en los Juegos Olímpicos pudo más.
El descenso libre está previsto para este jueves, un día cargado de actividad por los ventarrones que impidieron comenzar con el programa el pasado domingo y lunes.
También Breitfuss participará en esa prueba. Y se cerciorará de cumplir las reglas.
Breitfuss nació en Austria, pero dice haberse enamorado de Bolivia cuando la visitó. Adquirió la nacionalidad boliviana en 2015.
“Quiero representar a este país que quiero. En la semana todo va a mejorar”, confió.
La primera presea de oro que reparte el esquí alpino quedó así en manos del austriaco Marcel Hirscher, considerado uno de los mejores esquiadores de todos los tiempos, con seis títulos mundiales en su haber. Sin embargo, jamás había obtenido un título olímpico. (D)
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LATINOS
Esa cantidad de deportistas de América Latina intervienen en los Juegos Olímpicos de Invierno: Brasil (9), Chile (7), Argentina (6), Colombia (4), Bolivia (2), Ecuador (1).