El uruguayo Federico Valverde está en boca de todos luego de la jugada que protagonizó y que fue clave para el posterior triunfo por penales del Real Madrid ante el Atlético de Madrid en la final de la Supercopa de España.
Cuando quedaban cinco minutos para el final de la prórroga y con el partido 0-0, Valverde se fue expulsado luego de propinarle una tremenda patada a Álvaro Morata, que iba solo rumbo al arco merengue.
No sabemos si Morata iba a marcar o no, lo cierto y concreto es que Valverde cortó una chance clarísima del rival y el partido se decidió desde el punto penal con triunfo y título para el Real Madrid.
Tras el encuentro, Valverde fue elegido el mejor jugador de la final de la Supercopa.
El centrocampista charrúa, revelación de la temporada, recogió el trofeo en el escenario habilitado en el centro del terreno de juego del King Abdullah Sport City antes de que los equipos subieran para recoger sus respectivos premios.