Debido a que apenas este martes empezó a colocarse el pasto híbrido en el Estadio Azteca, Cruz Azul puede debutar en dicha cancha sin haber entrenado sobre ella.
Instalación del césped híbrido en el @EstadioAzteca #HybridGrass 🌱🏟🌱 pic.twitter.com/xbi7RCrjuu
— Estadio Azteca (@EstadioAzteca) 17 de julio de 2018
En el plan de la semana del técnico Pedro Caixinha estaba el trabajar el miércoles en el coloso de Santa Úrsula, pero dadas las circunstancias hasta el momento se desconoce si la Máquina la ocupará previo a su primer partido del Apertura 2018 (sábado 17:00 hrs vs Puebla).
Un allegado al club comentó que será mañana cuando se tome una decisión al respecto. Lo cierto es que el Azteca es el primer inmueble de futbol de México en el que se implanta césped híbrido. La primera cancha en tenerlo fue una del Centro de Alto Rendimiento (CAR) de la Federación Mexicana de Futbol.
El ingeniero Alejandro Torróntegui, gerente de operaciones del Estadio Caliente habló sobre el pasto híbrido. “No afecta en nada en el rodar del balón, es igual a como rueda en un pasto natural, a diferencia de lo que sucede con el pasto sintético. Y su ventaja es que es más resistente en las barridas”.
Comentó que se pensó en hacer un pasto híbrido para darle un poco más de volumen. “Si se hace ahí un concierto u otro evento el deterioro del pasto natural será menor porque se tiene el otro pasto que te ayuda; su el natural se muere por algún motivo el otro refuerza”.
Dijo que primero se instala el pasto sintético. “Es como una malla que tiene poros y posteriormente el natural, el cual con los días se empieza a enraizar, a enredar, con la malla. El natural crece y al podarlo se debe hacer a una altura no menor a la del sintético para que no se lleve al de abajo. Los dos tienen similar anchura; ya instalado uno no se da cuenta cuál es la hoja natural y la fibra natural, que actúa solo como un refuerzo”.
Luego descartó que el jugador corra el riesgo de lesionarse, ya que el césped predominante es el natural, “pues no tiene los rellenos de caucho de una sintética”.
Torróntegui asegura que el costo de un pasto del tipo asciende a un 1 millón de dólares, porque al haber dos pastos se incrementa al doble, “dependiendo de la calidad que se elija. Una FIFA anda por ese precio”.
Por lo mismo supone que las canchas de entrenamiento que tendrán Cruz Azul y América en su respectiva instalación será de otra calidad para que el gasto sea menor. “Creo que tendrán algo diferente a la del Azteca”.