El rostro de Ricardo Gareca al final del partido expresó todo lo que sentía por la caída (1-0) ante Ecuador, su primer rival en amistosos luego del subcampeonato en la Copa América. El único gol lo marcó Erick Castillo.
El ‘Tigre’ se agarró el pecho, hizo una mirada al campo y luego se dirigió angustiado al vestuario del Red Bull Arena.
La selección peruana no jugó bien. Debutaron Gabriel Costa y Kevin Quevedo.