La trayectoria del joven talento rossonero se ha convertido en un mar de corrientes diversas en las que él era la roca en la que venía a parar cada arremetida del agua hasta que al final ha desgastado de sobre manera su disposición, haciendo añicos la mente del guardameta que quiere encontrar una salida y poner fin al calvario que ha atravesado bajo los palos del AC Milan.
Que el conjunto milanista se decidiera a apostar por él cuando solo tenía 16 años no ha mermado la ambición de un jugador que tensó la cuerda hasta más no poder durante el pasado verano donde, finalmente, acabó firmando una renovación que acabaría dando mucho que hablar. Incentivado por su agente, Mino Raiola, Gianluigi Donnarumma habría aumentado sus pretensiones hasta el punto de tener claro que, tras todo lo acontecido, su decisión firme es marcharse al término de la temporada del club que le mando a la élite.
Su destino, como no podía ser de otra manera, sería el PSG. Según Quotidiano Sportive, el guardameta ya habría tomado la decisión de comprometer su futuro con el equipo parisino a partir del próximo verano, en una operación que promete tener largos y sonoros capítulos como ya ocurriera en el anterior mercado estival. La decisión por parte del AC Milan podría ser la misma que antaño, aunque tener a un portero descentrado, que durante la temporada actual ha dejado evidente un rendimiento por debajo del esperado ante la presión a la habría sido sometido, no parece ser una buena solución.
El PSG, por su parte, tiene asumida la idea de incorporar a un portero que sí ostente el título de ser uno de los mejores del panorama mundial. Contando actualmente con Alphonse Areola como habitual y con Kevin Trapp ya como suplente, ni uno ni otro estarían entre los 10 mejores arqueros actuales. Una situación que tratará de cambiar en la próxima ventana de traspasos como objetivo prioritario en su intención de seguir manteniendo su condición de aspirante al trono europeo, donde el elegido sería el talentoso Donnarumma, reconocido como el sustituto en la Azurra de Gianluigi Buffon.