El futbolista Rodrigo Espíndola, que militaba en el club Nueva Chicago, de la Segunda División del fútbol argentino, fue asesinado la madrugada del viernes tras recibir un disparo en el abdomen al intentar defender a su familia durante un asalto frente a su casa, en el oeste de la provincia de Buenos Aires.
El defensor, de 26 años, fue sorprendido por dos ladrones cuando intentaba ingresar a su vivienda, en Monte Grande, junto con su esposa y su bebé de seis meses, que se encuentran bien, informaron fuentes policiales.
Tras recibir un balazo en el abdomen, Espíndola fue trasladado al hospital Santamarina, donde falleció.
Video puede ser clave
Las cámaras de seguridad instaladas en la vivienda del jugador pueden ser claves para atrapar a los asesinos.
El viernes por la noche, los investigadores hallaron abandonado y quemado el Ford Ka Viral, utilizado por los delincuentes, en un descampado del El Jagüel, a 45 cuadras del lugar en el que fue asesinado el futbolista.
Según Clarín, la policía ya detuvo a una persona que "habría actuado como partícipe necesario ya que conducía un vehículo de apoyo al Ford Ka Viral".
Sobre el jugador
El jugador se inició en Chacarita Juniors y después tuvo un paso fugaz por Racing, donde jugó en el equipo de reserva. Luego fue transferido a Nueva Chicago, donde actuaba desde 2014. EFE