El Atlético de Madrid hará todo lo que esté en su mano para reclutar a James Rodríguez. Los colchoneros entienden que el colombiano es un jugador que podría impulsar considerablemente su ataque y están dispuestos a realizar todos los esfuerzos oportunos par lograr su aterrizaje en el Wanda Metropolitano.
Aunque cuentan con el beneplácito de un futbolista que estaría encantado de ponerse a las órdenes de Diego Simeone, lo cierto es que la operación se antoja muy complicada. En primer lugar, porque el Real Madrid no termina de ver con buenos ojos que otro de sus futbolistas recale en su vecino y eterno rival (ya lo hizo Marcos Llorente), y en segundo, por la competencia que viene ejerciendo el Nápoles.
Eso sí, en estos últimos días, el cuadro italiano ha perdido fuelle como pretendiente, ya que a los de Chamartín no les ha sentado nada bien que su presidente, en su afán por lograr su desembarco en condiciones más ventajosas, haya criticado a Florentino Pérez. «No queremos ceder ante las injustas peticiones de Florentino», indicó hace unos días Aurelio de Laurentiis.
Consciente de todos estos obstáculos, la directiva rojiblanca ha optado por tomarse el asunto con calma. De hecho, una información del diario Marca certifica hoy que sus dirigentes no tendrán problemas en apurar el mercado estival para cerrar la operación. Aunque entienden que lo mejor para el equipo es que James pudiera incorporarse cuanto antes para ir acoplándose a los métodos del Cholo, los directivos creen que, por el talento que alberga en sus botas el cafetero, la espera podría merecer la pena.