Real Madrid 3 - 4 Real Sociedad
Nueva ración de Copa del Rey. El Santiago Bernabéu acogía el primer partido de la competición esta temporada con motivo de los cuartos de final. El Real Madrid se veía las caras con la Real Sociedad. Lo hacía ya con un doble aviso después de lo que había pasado con Valencia y Villarreal, que pese a partir como favoritos en sus visitas a Granada y Mirandés quedaron apeados.
La sobrecarga de partidos, y consciente de todo lo que viene por delante, Zinedine Zidane decidió mezclar en su once a algunos de los intocables como Sergio Ramos en el centro de la zaga, Toni Kroos y Fede Valverde en la medular y Karim Benzema en el ataque con otros menos habituales. Así, destacaba sobre todo la presencia tanto de James Rodríguez como de Brahim, futbolista este último que está aprovechando la Copa del Rey como una oportunidad para disfrutar de los minutos que carece en Liga. Y lo cierto es que el ex del Manchester City estaba mostrando una buena versión cuando está sobre el césped... hasta hoy.
La cuña se llama Martin Odegaard
Comenzó el partido con un ritmo anodino en el que ninguna de las dos escuadras terminaba de imponer su juego. Nadie desequilibraba y el protagonista de los primeros compases era un Mateu Lahoz que en menos de veinte minutos ya había amonestado a dos jugadores y continúa alargando su leyenda a este respecto. Continuaba avanzando el choque por estos derroteros cuando la Real Sociedad abrió el marcador. Fue por medio de un Martin Odegaard que aprovechó un pobre rechace y la falta de reflejos de Alphonse Areola para poner el un 0-1 en el marcador que no celebró. Era el minuto 22 y el tanto visitante espoleó a un Real Madrid que con más casta que acierto dio un paso al frente. Vinícius protagonizó una jugada de habilidad y potencia que no supo remachar Benzema en el 25 y James Rodríguez veía como un tiro ajustado era despejado por Alex Remiro en el 35.
Los locales seguían percutiendo y Vinícius estuvo a punto de protagonizar la jugada de la noche cuando se coló en el área pequeña en el minuto 37 y cedía para Karim Benzema, si bien el francés no lograba conectar y el balón acababa en los pies de un Fede Valverde que obligaba a emplearse nuevamente al portero visitante. Con un poco más de atrevimiento y confianza, podría ser el propio Vinicíus el que podría haber intentado culminar la jugada. Apenas un minuto más tarde Sergio Ramos estrellaba un balón en el travesaño pero la jugada era anulada por fuera de juego.
Ya en el minuto 42, y cuando el partido estaba a punto de irse al descanso, Vinícius volvía a generar peligro con una incursión que Marcelo (despistado y en fuera de juego) le impedía remachar. Pieza clave del Real Madrid desde su irrupción en el primer equipo, es indudable que Marcelo no es el mismo. Si bien es cierto que su edad no lo indica (apenas cuenta con 31 años), el internacional canarinho ha visto como su nivel ha ido menguado. Sus incorporaciones al ataque siguen siendo habituales. Sin embargo, ya no son tan determinantes como antaño. Falla incluso en detalles que antes hubieran sido impensables, como controles. Es como si hubiera perdido el tacto y el balón le fuera esquivo. En algunas jugadas acaba incluso estorbando a sus compañeros.
Con un Ferland Mendy que está creciendo como la espuma y además de dar ese plus defensivo que demanda Zidane también se incorpora con peligro, y Sergio Reguilón y Achraf de vuelta el próximo verano tras sus cesiones en Sevilla y Dortmund, quien sabe si podríamos estar viviendo la última temporada del de Rio de Janeiro con la elástica merengue.
Con Ramos subiendo a rematar y precisamente Marcelo (otra vez) perdido en la zona de ataque, la Real Sociedad estuvo a punto de poner tierra de por medio en un contrataque en el minuto 44, si bien Alexander Isak sumaba su enésimo error de la tarde y perdonaba la vida a la escuadra local que se marchaba al descanso con 0-1.
Una segunda parte espectacular
Consciente de la necesidad de controlar más el partido, Zinedine Zidane decidió realizar un cambio al descanso y dar la alternativa a Luka Modric a fin de ocupar el hueco de un James Rodríguez prácticamente invisible en la primera mitad. Sin embargo, en apenas diez minutos el Real Madrid dijo adiós a la Copa del Rey.
El protagonista no fue otro que el sueco Isak, que después de ver como el VAR le privaba de un gol que Martin Odegaard le había servido en bandeja marcaba dos en apenas un par de minutos (54 y 55) y dejaba tremendamente tocado al equipo merengue. Sin embargo, nunca hay que dar por muerto al Real Madrid, que en el 59 recortaba distancias por medio de Marcelo mientras el público del Santiago Bernabéu creía en la remontada. También los jugadores merengues, que envalentonados con su público daban un nuevo arreón en busca de la remontada. Vinícius volvía a ser protagonista en el 64 con una buena jugada que no terminaba de finalizar de la mejor manera.
Sin embargo, la Real Sociedad aniquiló el eliminatoria. Lo hizo en el minuto 68 cuando aprovechó el enésimo fallo de la defensa merengue y la ineficacia de un Alphonse Areola que ha disputado su peor partido desde que juega en España (incluyendo su etapa en el Villarreal) para poner el 1-4 por medio de un Mikel Merino inconmensurable.
Quedaban 20 minutos por delante y el Real Madrid no iba a desfallecer. Pese a lo imposible de la misión el conjunto blanco tiró de orgullo. Zinedine Zidane metía en el campo a Rodrygo y Luka Jovic para intentar el milagro. Vinícius marcaba de cabeza en el 78 pero el VAR no le daba validez. El propio brasileño protagonizaba una arrancada en el 80 que culminaba su compatriota Rodrygo en el 81 para poner el 2-4. Quedaban diez minutos y el Real Madrid volvía a creer por increíble que pareciera.
Los locales percutían y la Real Sociedad daban un paso atrás para atrincherarse en la defensa mientras los minutos se agotaban. Nacho ponía todo patas arriba en el tiempo suplementario con un testarazo que significaba el 3-4 pero al Real Madrid se le acabó el tiempo. El resultado no volvió a moverse y será la Real Sociedad la que dispute las semifinales de Copa del Rey.