Cuando Philippe Coutinho llegó al Barcelona por 120 millones de euros, ni la directiva ni la hinchada pensaron que en menos de 2 años la situación cambiaría tanto. Hoy por hoy, con el Bayern Munich negándose a pagar la opción de compra, la vuelta del brasileño al Camp Nou es un problema económico grave.
El Barza ahora mismo desea una venta del jugador por una cifra que no baje los 80 millones de euros, cifra que todavía falta pagarle al Liverpool, o una cesión por una temporada a un club de la Premier League dónde el brasileño disputó sus mejores partidos. Además, equipos como el Manchester United, Manchester City, Chelsea, Arsenal o Tottenham tienen el poder económico para hacerse cargo de la planilla del futbolista que ronda los 30 millones de euros.
Sin embargo, al no aparecer ofertas formales por Coutinho, quien tuvo un paso irregular por la Bundesliga, el regreso parece estar decantado. Más aún con las declaraciones de Quique Setién quien señaló que el juego del mediocampista le gusta mucho.
Esto puede provocar 50 millones de euros en pérdida para la siguiente temporada. No solo por el sueldo del jugador si no porque una cláusula en su contrato indica que si llega a 100 partidos con el FC Barcelona, el club catalán deberá pagarle 20 millones de euros más al Liverpool.