Paolo Guerrero vive el momento más complicado de su carrera futbolística. El delantero nacional se desvinculó del Inter de Porto Alegre y, por primera vez en su carrera, se encuentra como jugador libre. Las constantes lesiones sufridas en su rodilla han puesto al capitán de la selección peruana entre la espada y la pared.
El 16 de agosto de 2020, en el partido entre Fluminense e Inter de Porto Alegre, Paolo Guerrero sufrió la rotura del ligamento cruzado de la rodilla derecha. Aquel día, el delantero nacional anotó el único tanto colorado en la derrota 2-1 pero tuvo que retirarse del campo a los 66′ por la ya mencionada lesión.
El atacante de la Bicolor estuvo alejado de las canchas hasta el 14 de marzo de este año cuando regresó en la victoria 4-2 del Inter ante Yaparinga por el Campeonato Gaucho. Fue convocado a la selección peruana para la fecha de eliminatorias de junio ante Colombia y Ecuador pero quedó fuera de la Copa América 2021 por una tendinitis en la misma rodilla.
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Dicha lesión lo alejó de las canchas hasta agosto cuando volvió a jugar por el Brasileirao. Tras alternar en su club, volvió a la Bicolor para las fechas eliminatorias de setiembre y octubre. No obstante, luego del duelo ante Chile el pasado 7 de octubre, volvió a lesionarse la rodilla. Esta última recaída terminó de decidir su futuro en el cuadro colorado.