El PSG, ahora sí, está respondiendo a la altura de los millones que invierte. Sus astros se han alineado firmemente en el mismo firmamento y están brillando más que nunca. Con números mucho mejores a la temporada anterior, la MNM -el fascinante tridente parisino- anuncia un final de ensueño. Pero habrá que esperar. PSG, más que cualquier otro club, ya aprendió a manejar su ilusión con cautela.
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