19/04/2024

Cada generación le cuesta a Pachuca 2 millones de dólares

Jueves 05 de Septiembre del 2019

Cada generación le cuesta a Pachuca 2 millones de dólares

La institución proyecta que cada generación de 40 niños que llegan al club cuesta 2 millones de dólares. Con la venta de un futbolista al año recuperan la inversión en fuerzas básicas.

La institución proyecta que cada generación de 40 niños que llegan al club cuesta 2 millones de dólares. Con la venta de un futbolista al año recuperan la inversión en fuerzas básicas.

PACHUCA -- Pachuca se ha puesto el objetivo de debutar cada torneo al menos un jugador. La pirámide de formación tiene en la cúspide al jugador que atravesó todo el sistema de formación del club, que estadísticamente llegó a los 9 años, y pudo debutar en primera división; pero en la base, 40 elementos llegan a la Universidad del Futbol, que a su vez fueron seleccionados de un conjunto de 700 prospectos, resultado de las 80,000 visorías que realiza el club cada año.

“Creemos que una generación completa de 9 años a Primera División cuesta dos millones de dólares y si solamente llega un jugador, eso es lo que costó, dos millones de dólares”, indica Marco Garcés.

En los últimos 10 años, Pachuca debutó a 120 jugadores que se formaron en sus fuerzas básicas. El club continúa su búsqueda de emular el éxito que llegaron a tener con Hirving Lozano. Algunos juveniles nacidos entre 1999 y 2005 son los que ven más próximo el horizonte de la Liga BBVA MX y en su esfuerzo por lograr que estos canteranos lleguen al máximo circuito, el club puede llegar a gastar hasta 40 millones de pesos por generación.

El embudo de selección para llegar al profesionalismo indica que sólo el 0.03 por ciento de los niños que pasan por visorías son elegidos para iniciar en la generación anual de Tuzos. De ésa cosecha, sólo dos debutarán.

En las paredes de las oficinas donde se juntan inteligencia deportiva, fuerzas básicas y la dirección deportiva se encuentra escrita con plumón una escala del desarrollo que debe seguir el futbolista. Esta va de los ocho a los 22 años y, debido a la exigencia interna, Garcés es contundente. “Es muy caro tener a un jugador, así que, si viene uno de mejor nivel, otro se va”.

La inversión de pasa un momento crítico cuando los jugadores llegan entre los 14 y 16 años, cuando el desarrollo humano los pone en situaciones e inquietudes como amigos y novias.

“Tenemos todo claramente señalado. Le llamamos horario ‘Tipo’ que le indica todo desde que se despierta, se baña, desayuna, comida, colación, cena estudio, entrenamiento actividades libres. Opción de salir fin de semana con familia y con pase firmado los llevamos al centro comercial, al cine y cada vez tienen más determinación de qué quieren hacer, cuándo empiezan con las novias y otras cosas. Ahí intentamos educarlos y conducirlos hacia fuera”, declaró el director deportivo.

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