LOS ÁNGELES -- La luna de miel entre Luis Fernando Tena y la afición de Chivas duró menos que Shakira y Jennifer López en el intermedio del SuperTazón.
Cerró el Apertura 2019 entre mimos y en la fecha 4 del Clausura 2020, la guillotina tuitera afiló como #TrendTopic la guillotina con el #FueraTena. ¿Sangre inocente o sangre culpable?
Inevitablemente el técnico ha cometido errores. E, inexplicablemente, al técnico le han rendido horrores. Tena abusó de su buena suerte y han abusado de ser buena gente.
Tomemos carne fresca, en el 2-2 con San Luis. Tena decide usar al Chicote Calderón como volante por izquierda. Y el Chicote fue un chipote. Se equivoca al técnico al sobrevalorar al jugador.
Educar a un futbolista sobre una nueva posición, a la que además se muestra reacio, daña al entrenador, al futbolista y la relación entre ambos. Calderón, como lateral homenajea su apodo de Chicote. Como volante nunca se ubicó en la formación de Tena.
Hay un ejemplo fascinante. Cuando Miguel Mejía Barón decide improvisar a Ramón Ramírez como lateral izquierdo, pareció una medida genial e ingeniosa. Era la mejor salida del Tri, pero por ahí, por equivocaciones de Ramón, cayeron dos de los goles de Argentina en la Final de la Copa América.
¿Error de Mejía Barón o de Ramón? Fue un riesgo calculado. Los imponderables calibran el destino de un juego de futbol. Al tiempo, Ramón dominó ambos territorios de la cancha.
Y con el mismo Ramón Ramírez, cuando Manuel Lapuente lo inventó jugando por derecha, a perfil cambiado, en el Mundial de Francia, parecía una jugada maestra. Pero, las necesidades del Tri lo reubicaron en su sitio.
Sin duda, ahora, Tena esperaba más de Chicote, pero aprendió que un jugador, al que ya le critican desplantes altaneros en Guadalajara, no puede o no quiere, aunque deba, aprender a jugar en sitios que le exigen más mental, física y tácticamente.
Insisto: ¿falla Tena o le fallan a Tena?
El mismo Luis Fernando endiosa a La Chofis López. El torneo anterior lo cerró como el jugador notable que promete y no se decide a ser. Y como sus antecesores, desde la era del Chepo de la Torre, Tena se la juega con el jugador, cliente VIP del Calatrava de Guadalajara.
¿Qué ocurre ante San Luis? Que aparece La Chofis inconsistente e incompetente. No marca, no ayuda en coberturas, no colabora en el dos a uno, no pelea balones, no hace recorridos, y vagabundea en la cancha, amparado por el penalti cobrado.
¿Por qué Tena no se atrevió a sacarlo desde el primer tiempo entendiendo que con La Chofis y Oribe estaba defendiendo con dos menos y atacando con dos menos, conforme a la exigencia, el ritmo e intensidad del juego?
Sólo el técnico de Chivas lo sabe. Y de nuevo: ¿falla Tena o le fallan a Tena?
Insisto, Tena acumula responsabilidades por sus irresponsabilidades. Pero también llega el momento de pagar y cobrar facturas.
Ha perdido a dos de las mejores contrataciones: J.J. Macías, entre algodones; y Víctor Guzmán, entre escándalos. El primero está pronto a regresar, y el segundo tiene menos futuro que una prueba B de otrora gimnasta soviético.
Lo de Macías ya lo explicamos. En León, el futbolista vivía lejos de la presión y las candilejas. Simplemente disfrutaba su estatus morboso por la nostalgia que despertaba en la tribuna del Guadalajara.
Llegar a Chivas como el tipo más mediático y con el escalafón triunfalista de ser el mecenas, ese estrés, esa saturación de responsabilidades, le generó la lesión por fatiga muscular. Con León tuvo más ritmo y más exigencia, sin este tipo de sobresaltos.
Hay más. Chivas pujó por Erick Aguirre y hasta intentó ir por Erick Gutiérrez. Aguirre, ante Tigres, demostró que es el jugador que hoy necesita Chivas, para no obligar a Tena a desmadejadas elucubraciones como lo ha hecho con Angulo y con Calderón.
Pero, es entendible, con El Pocho Guzmán, y sin saber la emboscada generada por el traspatio sucio del futbolista, en ese momento, ni Ricardo Peláez ni el mismo Tena, consideraban necesario pujar por Gutiérrez y Aguirre, quien, aparentemente ya está comprometido para emigrar al Rebaño el próximo torneo.
Por eso, reitero: ¿Falla Tena o le fallan a Tena? Queda claro que ocurren ambas situaciones. Tena abusa y abusan de él.
Versiones circulan este lunes de que la más reciente reunión entre Tena y Peláez ya pisó terrenos que ninguno quería pisar, y no estamos hablando de las invocaciones religiosas del directivo en el palco de Dorados.
El problema es que los sermones y advertencias deben surtir efecto ante Tigres, un equipo y un entrenador tan desesperados como en Chivas, con todo y que marche invicto, porque la primera promesa quedó incumplida: ganar la Copa Mx.