José Luis Trejo llevó las riendas de un Cruz Azul que desplegaba un buen futbol y que llegó motivado a la Copa Libertadores de 2001, donde su equipo recibió grandes críticas, incluso, por parte de su homólogo en la Final ante Boca Juniors, el argentino Carlos Bianchi.
“Un año o dos años después (de aquella Final), cuando platiqué con Bianchi, él reconoció que Cruz Azul había sido el rival más complicado que habían tenido en cualquier Final, porque él, anteriormente había tenido otra Final, pero reconoció que Cruz Azul había sido un rival muy difícil”.
Añadió José Luis Trejo: “Fueron dos grandes duelos, con gran respeto para el señor Bianchi, un técnico muy reconocido en todas partes del mundo. La verdad, en el primer partido nos neutralizaron muy bien, sabían cómo era nuestra estrategia de juego; marcaron tanto a Palencia como a Cardozo de forma impecable y lograron mantener el cero, que eso era muy importante para ellos. Se les presentó una oportunidad hasta el segundo tiempo, la metieron y nos controlaron”.
“Los dos partidos de la Final para nosotros eran muy importantes; sabíamos que teníamos que tomar una ventaja y eso tratamos de hacer en casa, pero no se dio. Al final nos fuimos con un resultado adverso, pero sabíamos que independientemente de todo, teníamos la posibilidad de hacerles daño allá, pues dentro de todo nosotros teníamos un mejor funcionamiento y ganamos 0-1”.
“En ese segundo partido, teníamos un problema: Matute se enfermó de gripa, tenía fiebre y los días anteriores no pudo entrenar. Andaba muy débil y previo al juego, le hicimos una prueba en la cancha para ver si podía participar, pero definitivamente no pudo. Jugó Tomás Campos en su lugar y lo hizo excelente, fue uno de sus mejores partidos”.
Dijo: “Para Boca fue una sorpresa, porque Campos apareció por el lado izquierdo y junto con Pinheiro, llegaron mucho (al frente). Así que fue un descontrol para Boca; a pesar de que si tuvimos problemas para resolverlo, fuimos mejores en lo futbolístico”.
Sobre por qué eligió a Campos, un integrante más de ese grupo de jóvenes a los cuales venía otorgando todo su respaldo, como pasaba también con Norberto Ángéles, José Alberto Hernández y la ‘Vitola’ Víctor Gutiérrez, expresó: “No había mucho que decir, yo confiaba mucho en cualquiera de ellos”.
“Para mi no era sorprendente verlo, porque esa camada de jóvenes fue muy importante para Cruz Azul. Ellos se habían formado en Cruz Azul Hidalgo, pero tenían una base muy sólida y una capacidad muy importante, lo cual se juntó con gente de mucha experiencia y calidad, como Pinheiro, Almaguer, Adomaitis, Paco Palencia, Cardozo”.
Asimismo, explicó sus razones en torno a por qué eligió a un novel como José Alberto Hernández en la tanda final de penales.
“Estaba muy claro quienes iban a tirarlos. Normalmente les pregunto si todos están en condiciones, pero ya teníamos mas o menos claro quienes podían cobrar. Prueba de ello es que siempre estuvimos ensayando los penales; en el caso de ‘Don Juan’ (Hernández), diríamos que era el más seguro en cobrarlos, porque en todos los entrenamientos te puedo decir que no fallaba un solo penal”.
--Al final, de cuatro que tiraron, sólo Francisco Palencia atinó en la tanda de penales, ¿a qué lo atribuye?
“Pues, mira, en una Final y en un estadio como el de Boca, no deja de ser complicado, partiendo de la base de que en ese momento, el árbitro escogió la portería donde prácticamente estaba la mayor hinchada de Boca… Yo estaba seguro que nuestros tiradores iban a anotar, pero no fue así; el escenario también cuenta un poco”.
“Es una cuestión de nervios, es una cuestión de control mental. Te puedo decir que las ejecuciones en los entrenamientos eran perfectas; de ahí, la confianza en los tiradores. No es para reprocharse; yo los veía y los sentía seguros, pero al final de cuentas los nervios traicionaron a los que fallaron”.
‘JUEGO SUCIO’
“Hay que dejar claro que nosotros siempre jugamos con todas las desventajas, en todos lo sentidos, y los arbitrajes nunca fueron la excepción. En el juego de visita ante Rosario Central, tuvimos uno de los arbitrajes más malos que te puedes imaginar en cualquier Liga, y nos tratamos de imponer a todas esas adversidades”.
“Yo creo que siempre trataron de coartarnos el camino, pero esas cosas pasan en Sudamérica y lo del árbitro, pues tomó esa decisión y hay que respetarla. ¿por qué fue?, pues, porque así lo decidió, y seguramente con un poco de presión por parte del equipo local. Pero esto pasa más a ser una anécdota, porque finalmente sí influyó”.
CALLARON A ‘LA BOMBONERA’
Sin embargo, José Luis Trejo se mostró ufano porque la Máquina Celeste provocó que La Bombonera enmudeciera en aquella mítica Final.
“En Buenos aires, cuando nosotros íbamos ganando 0-1, la gente estaba callada, cuando normalmente ese estadio apoya a su equipo los 90 minutos, pero con nosotros fue un silencio muy temeroso... Después de la premiación, el equipo fue aplaudido y se reconoció que había sido un digno rival”.