José Velásquez fue uno de los grandes baluartes en la época gloriosa de la Selección Peruana. Con su agresividad en la marca y su buena repartición de balón se ganó a pulso un espacio en la historia de la 'blanquirroja' con la que llegó a disputar los mundiales de Argentina 1978 y España 1982.
Precisamente en la Copa del Mundo europea, que sería el último de la Selección Peruana en 36 años, tuvo entre lo anecdótico, además de que no sumamos ningún triunfo, el encontronazo de José Velásquez con un réferi alemán.
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Se jugaba la segunda fecha de la fase de grupos y Perú enfrentaba a Italia en el estadio de Balaídos en Vigo. La “azurra” ganaba 1-0 antes de finalizar el primer tiempo, por ende la bicolor debía pisar el acelerador y fue en ese aumento de vehemencia que José Velásquez tuvo un choque casual con el árbitro del encuentro Walter Eschweiler.
El juez alemán, con la humanidad del “Patrón”, fue el más perjudicado al caer al suelo y quedarse varios segundos lastimado con algo de sangre en el rostro y las tarjetas regadas, ante la sorpresa de la vista de los 30 mil espectadores en el estadio del Celta de Vigo.
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Al ver la escena el “Patrón” salió escapó metros más adelante para evitar alguna sanción y fueron Juan Carlos Oblitas y Julio César Uribe quienes lo auxiliaron. El duelo terminaría igualado 1-1 con gol de Ruben Díaz para nosotros.
Dicho empate nos obligaba a vencer a Polonia la siguiente fecha si queríamos avanzar, sin embargo, el equipo de Lato goleó 5-0 al conjunto incaico y con ello marcaría la despedida en mucho tiempo de los mundiales. De todos modos, esta es una anécdota que seguramente el buen 'Patrón' recordará hoy en su onomástico número 68.