En 2007, Alberto Contador logró su primer triunfo en el Tour en la subida a Plateau de Beille. Ocho años después, el madrileño no se encuentra en la forma óptima en la carrera francesa: “La cabeza sí funciona, lo que no me van son la piernas. Ahora resulta fácil hablar, pero quizá debí descansar más o no disputar la Ruta del Sur. Aun así, no bajo los brazos. Falta mucho por disputar y guardo buenos recuerdos de aquella ronda”.
La tercera etapa de los Pirineos, con un puerto de segunda (Portet d’Aspet, donde murió Fabio Casartelli en 1995), dos de primera (Core y Lers) y la llegada en Plateau de Beille, de categoría especial (15,8 kilómetros al 7,9%), supondrá “una buena oportunidad para probar a Froome”, en palabras de Nairo Quintana. “Disponemos de dos bazas a jugar, la de Alejandro y la mía, así que buscaremos movernos. En el Tourmalet no intentamos nada debido al calor asfixiante y a la fatiga que se acumula”.
Valverde, cuarto a 3:59 tras recortar dos segundos a Froome en Cauterets, secunda a su líder: “En Movistar trataremos de romper el ritmo del Sky, aunque han demostrado mucha fuerza”. La que les falta a Nibali y Purito, cada vez más lejos en la clasificación. El italiano, 11º, a 7:47: “No me siento bien”. El catalán, 19º, a 20:42: “Quedan pocas balas. La caída de la neutralizada me afectó”. Al menos, su renovación con Katusha para 2016 está lista.