Origen del nombre
(Por Raúl Cancio) La crisis de 1929 impidió que los Portsmouth Spartans cuajaran, por lo que en 1934 fueron adquiridos por un grupo inversor de Michigan liderado por George Richards, quien siguiendo la estela felina del baseball local, llamó Lions a la franquicia, “porque si el león es el rey de la jungla, mi equipo será el rey de la NFL”…y en cierta medida han sido y son los reyes…de las derrotas. Nadie excepto Detroit ha perdido los dieciséis partidos de la temporada regular, ni nadie ha perdido más partidos seguidos on the road.
Propietario: Martha Firestone Ford ***
Detroit. Firestone. Ford. Desde luego, todo encaja. La industria del automóvil es la gran protagonista en la zona. Martha se convirtió en propietaria el año pasado tras el fallecimiento de su marido, William, dueño histórico de la franquicia. Sus hijos también forman parte del accionariado, por lo que la sucesión está asegurada dentro de la familia. Tampoco se sabe si eso es bueno o no pues los Lions son uno de los grandes perdedores de la historia reciente de la NFL.
Manager general: Martin Mayhew ***
Mayhew ya estaba en los Lions cuando se produjo la catástrofe Matt Millen como general manager. Fue elegido para recoger los restos del naufragio y, desde entonces, la franquicia encontró el rumbo. Aún no han llegado a la tierra prometida, pero Mayhew ha drafteado con sensatez y ha movido al equipo muy bien para ser uno de los aspirantes, un notable conjunto que sólo está a un paso de poder ser considerado como un grande, y eso tiene mucho mérito viendo de donde venían.
Head coach: Jim Caldwell ***
Cuando Jim Caldwell fichó por los Lions se dijo que había conseguido un puesto de esos que no suelen quedar libres, con estrellas casi en cada línea. Pero eso no puede restar méritos a haber conseguido cambiar a un grupo que jugaba más para conseguir records de yardas y pases que para ganar partidos. Bajo Caldwell, la defensa de los Lions experimentó un cambio dramático y el ataque se volvió mucho más equilibrado. Eso les llevó a playoffs y a sentir que, al fin, la franquicia avanzaba. Pero ahora es necesario dar un paso más, y ese es el realmente complicado: aspirar a pelear por una Super Bowl. Lo harán con los principios clásicos que les han traído hasta aquí.
ESTADIO: Ford Field, un símbolo de regeneración en Detroit ****
(Por José Villelabeitia) Ford Field, al igual que el estadio de baseball adyacente, Comerica Park, se construyeron para revitalizar el centro urbano de la ciudad de Detroit. Desde hace años la ciudad que fue capital del motor y de la Motown vive un grave declive urbanístico, la ciudad en lugar de expandirse, va perdiendo espacios. Los Lions en 1975 se mudaron al Pontiac Silverdome, considerado el modelo de los domes por diseño y capacidad, pero fuera del centro urbano. El Ford Field, proyectado en su comienzo como estadio abierto, se caracteriza por sus enormes cristaleras, que pretenden dejar paso a la luz natural.
AFICIÓN: Subiéndose al carro cuando corresponde ***
(Por José Villelabeitia) La afición de los Detroit Lions se ha ganado por derecho a ser una de las mas sufridoras de la liga. Ya casi nadie se acuerda en la ciudad del motor de la última vez que el equipo tuvo opciones reales a ganar algo, ni tan siquiera cuando Barry Sanders corría por los campos de la NFL los Lions fueron un contendiente real. La etapa de Matt Millen destrozó durante años al equipo, es de entonces la famosa imagen de los aficionados con bolsas de papel en la cabeza, y que culminaría con el nefasto recuerdo del 0-16. Todo ello le ha valido a los aficionados a tener fama de ser lo que se conoce como “bandwagoner”, que significa que sólo se implican de verdad con el equipo cuando este lleva victorias a su casillero. La mejor prueba es que los Lions son uno de los equipos que recientemente mas blackouts de la televisión ha sufrido. Últimamente el estadio ofrece mejor aspecto pues al hecho de estar en el centro de la ciudad se une que los Lions tienen un equipo competitivo con un ataque espectacular, cuando se enchufa, y una línea defensiva liderada por Ndamukong Suh que prometía espectáculo cada domingo y que ya es historia.
CHEERLEADERS
(Por José Villelabeitia) Los Lions, como buena parte de los equipos mas antiguos de la NFL, no cuentan con cheerleaders.