Zinedine Zidane mira al futuro con optimismo. Tras cerrar un temporada cargada de éxitos, el técnico del Real Madrid ha visto como la directiva del cuadro blanco daba cumplida a respuesta a sus principales peticiones de cara al futuro, un motivo que le invita a pensar en que su escuadra será capaz de mantener la línea dibujada durante los últimos meses.
Tras el desembarco del lateral zurdo Theo Hernández y el retorno del mediocentro Marcos Llorente, el galo ha visto colmado su deseo de contar con dos jugadores por puesto, ya que el primero será la sombra de Marcelo y el segundo tratará de competir con el intocable Casemiro. Igualmente, la vuelta de Jesús Vallejo ha cerrado el hueco abierto en la defensa tras la marcha de Pepe.
Tal y como cuenta As, a día de hoy, las tres únicas posiciones que generan algo de preocupación al preparador francés son la portería, el lateral diestro y la punta de ataque. En el primero de los casos, porque el actual tercer cancerbero de la entidad, Rubén Yáñez, está valorando seriamente la posibilidad de buscar un equipo que le permita acumular minutos, y en los dos restantes, porque tanto Danilo como Álvaro Morata manejan ofertas más que interesantes tanto desde el punto deportivo como el económico.
Para cubrir las posibles bajas del meta y el carrilero diestro, los de Chamartín tirarían de cantera y recurrirían al galo Luca Zidane y el marroquí Achraf. Por su parte, la brecha ofensiva sería cerrada o bien por el anhelado Kylian Mbappé o por Borja Mayoral, futbolista que ha regresado a la entidad tras su cesión en el Wolfsburgo.