Cuando los clubes fichan a un jugador esperan que marque la diferencia. Sin embargo, esto no siempre sucede y algunos terminan generando más de un dolor de cabeza al comando técnico, sea por su bajo nivel o problemas fuera del campo.
El caso más sonado sin duda fue el de Juan Manuel Vargas. El volante de Universitario de Deportes regresó a tienda crema después de una trayectoria importante en Europa. Pero, no pudo reencontrarse con su mejor nivel por lo que tuvo que ser relegado al banco de suplentes o no estar siquiera en la lista de convocados.
En el caso de los foráneos que no dejaron buena impresión en nuestro fútbol sobresale el caso del argentino Mauricio Mazzetti, quien tuvo una participación negativa en Juan Aurich a tal punto de ser retirado del equipo.