El interés del Eibar en Asier Garitano no ha pillado por sorpresa al Leganés. Hace un mes aproximadamente los armeros llamaron al técnico para conocer su situación profesional. Fue eso, una simple llamada con la que los vascos trataron de sondear su presente y su futuro. Cero negociaciones abiertas. Tampoco hay contactos en marcha para cerrar su fichaje. Es más, desde entonces, aseguran fuentes próximas a este acercamiento, no ha habido ninguna conversación personal o telefónica al respecto.
Aunque desde Ipurúa se ha revelado públicamente que el preparador es uno de los candidatos a sentarse en su banquillo la próxima temporada para suplir a Gaizka Garitano, en Madrid no ven estas declaraciones como amenaza alguna para su continuidad. Todo quedaría enmarcado en el contexto de un simple coqueteo que aún no ha evolucionado a un interés serio, con cifras o proposiciones escritas en la mano.
En Butarque, por lo tanto, respiran tranquilos. Desde el club se afirma que no habrá comunicado oficial o reacción al respecto porque confían en que su entrenador permanezca, como mínimo, los dos años que tiene estipulados en su nuevo contrato, firmado con posterioridad a esa llamada para sondear sus circunstancias.
A ello hay que añadir el hecho de que Garitano no posee cláusula liberatoria si un equipo de superior categoría buscase sus servicios. Si el Eibar quiere al de Bergara, deberá pasar por caja abonando una cantidad por ahora no desvelada.
Una salida compleja
Más allá de formalismos, el Leganés siempre ha prometido a sus miembros (futbolistas y entrenadores) que pondría facilidades ante una hipotética salida si un conjunto de Primera estuviera interesado en ellos. El problema para el Eibar es que el Leganés jamás ha concretado esas facilidades. Tampoco existen precedentes que sirvan para saber qué postura tomará el club llegado el caso.
Además, el adiós de Garitano no sería un adiós cualquiera, más ahora que el Lega ha ampliado la influencia del entrenador en la entidad. Y es que, aunque Garitano había visto cómo su contrato se renovaba automáticamente cuando consiguió la salvación, el club le propuso aumentar en un año más, hasta 2017, el vínculo entre ambas partes y para ello, aceptó la mayoría de las peticiones que puso sobre la mesa el guipuzcoano.
Varias ya se han puesto en marcha, como la llegada de Chema Indias al cargo de director deportivo, la mejora de las instalaciones de Butarque o la apuesta en firme por fichajes de garantías. Un panorama complejo al que hay que unir la planificación para el próximo curso. Garitano ya ha dado una lista de altas y bajas que condiciona más si cabe su posible marcha.
Entre tanto, preparador no ha negado nunca sentirse halagado por el interés del Eibar. “Es fácil vincularme con el Eibar porque yo soy de allí. Yo soy de Bergara y he jugado dos años en el Eibar. La temporada del Leganés nos ha hecho crecer a todos y puede hacer que te vinculen con el Eibar o cualquier otro club, pero a día de hoy estoy sólo pensando en el Leganés”, comentó al diario As en una entrevista concedida el 29 de mayo.