LIMA (Perú).- La tensión creada por los ensayos misilísticos de Corea del Norte puede afectar la normal realización de los próximos Juegos Olímpicos de Invierno, previstos para febrero, en Pyeongchang, en Corea del Sur, a menos de 100 kilómetros de la frontera. Los atletas siguen con preocupación los sucesos, pero el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, propuso aquí una "tregua olímpica" dictada por las Naciones Unidas para proteger la realización de los Juegos.
"Está casi todo listo en Pyeongchang" aseguró el dirigente alemán en esta ciudad, donde se desarrolla la 130a Asamblea del COI. "Tenemos luz verde, vamos a tener unos excelentes Juegos de Invierno" afirmó, antes de explicar su plan para poner a salvo a las competencias de invierno de una escalada de agresiones.
"Todavía no veo que los deportistas no quieran concurrir por cuestiones de seguridad"Bach
"Estamos en una carrera hacia los Juegos, y por lo tanto nos mantenemos en contacto con todos los gobiernos involucrados. Apelamos a que se establezca una solución diplomática", señaló durante una reunión con los medios acreditados en Lima, expresando su deseo de que la Asamblea General de la ONU, que se reunirá en noviembre, apruebe la sanción de una "tregua olímpica" entre el 9 y el 25 de febrero, fechas de inicio y cierre de los Juegos.
"Todavía no veo que los deportistas no quieran concurrir por cuestiones de seguridad", señaló Bach. "Confío en que la paz tendrá éxito en la región".
Los últimos ensayos nucleares del régimen de Kim-Jong Un motivaron la respuesta de los Estados Unidos, que amenazó con represalias, lo que generó temor a que se inicie una guerra en la región de consecuencias inciertas. El Consejo de Seguridad de la ONU aplicó ayer más sanciones a los norcoreanos por sus pruebas con una bomba de hidrógeno. "No estamos buscando la guerra. Corea del Norte todavía no ha pasado el punto de no retorno. Si prueba que puede vivir en paz, el mundo vivirá en paz con ese país", afirmó la representante estadounidense ante el organismo supranacional, Nikki Haley.
"Dejamos la puerta abierta a todos los Comités Olímpicos Internacionales", afirmó Bach en alusión al organismo deportivo norcoreano. "Mantenemos el principio de neutralidad política", agregó.
Está previsto que la llama olímpica arribe a Pyeongchang el próximo 1° de noviembre, cien días antes de la ceremonia inaugural. Los departamentos en que se transformará la Villa Olímpica después de los Juegos "ya fueron todos vendidos", aseguró el titular del COI.