Francia defiende corona de campeona de Europa un año después de, sin Tony Parker, se llevara el bronce en el Mundial de España. En un momento histórico para la selección gala, su condición de anfitrión y el regreso del base de San Antonio Spurs disparan las expectativas del, para muchos, favorito al oro. El seleccionador Vincent Collet tendrá a sus órdenes una mezcla explosiva de físico y talento con mucho pedigrí NBA. Incluso con la baja habitual de Noah y los cortes de Mahinmi y Seraphin (además de Moerman, Jackson o Westermann), el equipo de Francia será un auténtico lujo: Parker, De Colo, Heurtel, Fournier, Batum, Diaw, Lauvergne, Ajinça, Gobert…
Por eso Tony Parker, en entrevista para FIBA, se siente feliz de ponerse otra vez al frente de un equipo que esta vez no mira con complejos a ninguna otra selección del continente: “Creo que es la selección francesa más potente de toda la historia. Para empezar, nunca hemos tenidos dos pívots puros del tamaño de Gobert y Ajinça, en pista parece que los dos miden 2,35 o algo así. Además todo el mundo está súper motivado. Se ve en la cara de todos los jugadores. Queremos el oro, no hay otro objetivo que no sea ese. Nunca antes se nos había considerado favoritos. Ahora sí y no huimos de esa etiqueta. España fue la dominadora sin debate posible durante cinco o seis años, es la hora de que Francia ocupe ese lugar”.