ANÁLISIS
La selección de Portugal se juega el pase directo al Mundial este martes ante Suiza en Lisboa. Sólo le vale ganar. Si lo consigue, será líder de su grupo. Si no suma los tres puntos, será el propio combinado helvético el que se clasifique directamente para la cita mundialista, mientras que Portugal debería jugarse el billete a Rusia en la repesca. Una posibilidad que nadie contempla a estas horas en el país luso, aún emborrachado de la euforia por ganar a Andorra. Mejor dicho, no por la victoria en sí, sino por cómo llegó, con Cristiano Ronaldo en plan estelar.
Los retos que le quedan a Cristiano Ronaldo
El ’7’ inició el partido en el banquillo, entró al terreno de juego cuando se llevaba disputado medio encuentro, y el empate a nada pronto se transformó en un 0-2 a favor de Portugal. Con gol de Cristiano incluido. Es la estrella de por sí. Pero es que encima llega en modo salvador. Ha sumado el 60% de los goles en esta fase de clasificación al Mundial. Lleva una media de un gol cada poco más de 100 minutos en los clasificatorios a las grandes citas continentales en toda su carrera con la selección. Lógico que haya una fe ciega en él para el choque en Da Luz de este martes.
Además, por si no fuera suficiente aliciente el billete directo al Mundial de Rusia, Cristiano tiene otro objetivo entre las manos para el encuentro de este martes ante Suiza: con un solo gol más, entraría en el podio de los máximos goleadores de selecciones de toda la historia. Ahora mismo, suma 79 goles en 176 partidos con el combinado luso. Los mismos que suma el mítico Chitalu con Zambia.
Lejos queda ya la marca de Pelé, por ejemplo: 77 goles con Brasil. Y por delante a día de hoy, sólo quedan tres jugadores que hayan marcado más goles con sus respectivas selecciones: Kamamoto con Japón (80 tantos), Ferenc Puskas con Hungría (84) y Ali Daei con Irán (109). Parece evidente que más pronto que tarde alcanzará al japonés para entrar en el podio -quizás incluso este mismo martes-, e incluso a Puskas para convertirse así en el máximo goleador europeo de selecciones de toda la historia. La duda es: ¿llegará Cristiano a alcanzar también la marca del iraní Ali Daei para convertirse en el máximo goleador histórico de selecciones?
A sus 32 años, Cristiano necesita 30 goles más. Y mantiene con el combinado nacional una media de un gol cada dos partidos, lo que supondría prácticamente 60 partidos más con la selección. Teniendo en cuenta que suele haber del orden de 13 partidos internacionales por año, Cristiano necesitaría unos 4 ó 5 años más con Portugal al mismo ritmo anotador para alcanzar a Ali Daeli, aproximadamente. Podría ser demasiado, incluso para un devorador de récords como Cristiano. ¿O no?