Por tercer año consecutivo, los mejores pilotos del mundo volverán a correr en el Autódromo Hermanos Rodríguez, un circuito que representa un gran reto para aquellos competidores que se verán las caras este 27, 28 y 29 de octubre.
Esta pista, de 4 mil 580 metros de longitud, tiene diversas curvas que, si bien no son peligrosas como la famosa curva peraltada que fue anulada, ponen a prueba las habilidades de los competidores en sus monoplazas.
Entre los principales retos en el Autódromo se encuentran:
- La curva uno, de casi 90°, requiere de un gran control al volante para librarla sin dificultad.
- Las curvas dos y tres no tienen un trazo orgánico o curvo, convirtiéndose en trazos más rectos y complicados.
- La curva cuatro, mejor conocida como 'la ese del lago', también cuenta con una frenada de cerca de 90° que inicia un trazo en forma de escuadra, confirmada por las curvas de la cuatro a la siete y que se caracteriza por tener varias rectas cortas unidas por breves curvas.
- La curva 10 manda a los coches cerca de un gran muro de contención, convirtiéndola en una curva difícil y peligrosa.
- La curva 12 cuenta con un trazo recto que permite a los pilotos acelerar y pasar cerca del muro de contención.
Sin embargo, el trazado también presenta ciertos puntos que garantizan seguridad y hasta los asistentes podrán disfrutar:
- Pasando la curva siete se encuentra una recta prolongada que lleva a las curvas ocho y nueve, trazado que permite a los autos llegar con mayor velocidad.
- La curva 13, diseñada para el Gran Premio pasado, da acceso a los autos por en medio del Foro Sol. En esta zona se encuentran también las curvas 15 y 16, que permiten que los monoplazas disminuyan su velocidad y puedan ser apreciados mejor por los espectadores.
- Se retoma la tradición en el Hermanos Rodríguez cuando la curva 17 se conecta a la mitad de la mítica curva peraltada para eventualmente integrarse a la recta principal.