La ciudad de Guangzhou fue el lugar en el que Florentino Pérez y Ramos enterraron el hacha de guerra de manera momentánea después de meses de enfrentamiento por culpa de la renovación del central. La primera toma de contacto entre ambos ha servido para poner fecha a la cumbre para retomar las negociaciones. Será a la vuelta de la Audi Cup, que disputará el Madrid en Múnich el 4 y 5 de agosto.
La reunión en China, que tuvo lugar en el Hotel Ritz Carlton de Guangzhou y en la que estuvieron presentes el presidente madridista, el director general del club, José Ángel Sánchez, Ramos y su hermano René tuvo como objeto principal suavizar posturas, aunque las diferencias entre ambas partes siguen siendo notables. El central se quejó a la cúpula madridista de que se hayan filtrado datos de la negociación y de la cuantía de la oferta de renovación que el club le presentó hace meses. Durante la reunión, se mostró muy molesto por el hecho de que se haya tratado de manchar su imagen y la de su familia haciendo ver que son unos peseteros.
Si bien es cierto que el encuentro de Guangzhou ha servido para que haya un primer acercamiento, la situación sigue siendo compleja. El central mantiene su idea de irse, aunque en el Madrid están convencidos de que terminará renovando. El Madrid le ha ofrecido una ficha de siete millones netos, pero él pide diez. El acuerdo podría cerrarse en nueve millones.