Después de que protestaron para exigir que un jugador de fútbol sea expulsado de la selección nacional de Georgia, por apoyar los derechos de los homosexuales, ocho personas fueron detenidas.
El grupo nacionalista de extrema derecha Marcha Georgiana exige que el defensa Guram Kashia sea castigado por haber llevado un brazalete arcoíris a principios de este mes, mientras capitaneaba al equipo holandés Vitesse Arnhem, como parte de una iniciativa más amplia en Holanda en apoyo del Día de Salir del Clóset.
Decenas de manifestantes se reunieron el martes pasado frente a la sede de la Federación Georgiana de Fútbol, gritando lemas contra los gays mientras lanzaban bengalas y bombas de humo. También quemaron una bandera arcoíris.
TE RECOMENDAMOS: Aún falta promover respeto para personas transexuales
No quedó claro por el momento cuántos de los arrestados eran miembros de la Marcha Georgiana, un grupo antiinmigrante y antigay que dice estar protegiendo la "pureza" de la sociedad en la nación del Cáucaso, pero comparecerán hoy a los tribunales.
Kashia le dijo al canal de televisión holandés NOS que está orgulloso de apoyar la igualdad de derechos y que no tiene intención de dejar de jugar para Georgia.
En las redes sociales, muchos georgianos cambiaron sus fotos de perfil en apoyo a Kashia, que también ha recibido el apoyo del presidente de Georgia.
"Todo el mundo tiene derecho a la libertad de expresión", dijo el lunes el presidente georgiano Giorgi Margvelashvili en una declaración en Facebook.
"Debemos respetar los derechos humanos y las libertades. Estoy de acuerdo con el apoyo unánime que la sociedad deportiva ha expresado a Guram Kashia”, finalizó.
ESS