—Lleva cinco triunfos en siete carreras y casi el doble de puntos que el segundo. Y todo, con el nuevo orden de salida, que le perjudica.
—Iba a ser un año difícil y de hecho lo es, no es fácil ganar carreras con la nueva norma. Sobre el papel es difícil, pero si miras las estadísticas parece lo contrario. Nunca tuve tanta ventaja y llevamos buen camino hacia un nuevo título, pero todavía no está ganado. Tenemos buenas prestaciones y consistencia, pero también los rivales están teniendo peores prestaciones y menos consistencia que otros años. Por eso tenemos tanta ventaja. Pero la lucha está siendo muy cerrada en muchos rallys, como en Suecia, que llegamos tres coches peleando al último tramo, o en Polonia y Portugal.
—Y ahora estamos en Finlandia, uno de los rallys más difíciles de ganar, donde de nuevo abrirá pista el noventa por ciento del recorrido.
—Es un rally en el que ganar es muy difícil. Aquí ganan casi siempre los finlandeses, como el año pasado Latvala, al que no pude superar. Pero voy a intentarlo de nuevo porque es un rally que me encanta con sus tramos tan rápidos, en los que disfruto mucho conduciendo. Por suerte, está lloviendo y aquí podría favorecerme mi posición de salida por primera vez en seis rallys. A nadie le gusta estar en desventaja si eres el mejor. En Fórmula 1 no se penaliza al que gana.
—Además, está en juego el liderato entre Francia y Finlandia en el ránking de victorias.
—Eso son sólo números. Yo no miro mucho las estadísticas y lo que realmente busco es disfrutar de lo que hago. Prefiero ser el piloto más feliz que el que tiene más victorias.
—¿Cómo ve los nuevos coches que llegarán en 2017? ¿Le animan a seguir corriendo muchos años?
—Me gustan. Es un cambio positivo. Más potencia, menos peso, más aerodinámica que mejora el comportamiento pero también da un aspecto más agresivo a los coches… todo mejora con ellos. Ahora llega Toyota, y si los mayores fabricantes del mundo están en este campeonato, será porque es un buen campeonato. Por el momento no sé hasta cuando voy a seguir. Seguro que seguiré en 2017 y los conduciré, pero no sé hasta cuando estaré en activo.
—Sigue, por tanto, sin pensar en batir los récords de Loeb. ¿Qué opina de los rumores que apuntan su regreso?
—Si somos realistas, estoy muy lejos aún, por lo que es estúpido pensar en ello ahora. No sé si volverá o no, pero creo que es bueno que haya lucha y si regresa, seguro que tendremos grandes peleas. Y eso me gusta.
—¿Cómo está viendo el año de Dani Sordo?
—Está teniendo un año de altibajos. Algunas veces va muy rápido y es el más rápido de los Hyundai, pero otras veces no ha ido tan bien. Creo que Dani depende mucho de la confianza. Cuando está confiado puede hacer grandes cosas, pero cuando la pierde también tiene un gran bajón en el rendimiento.