Este miércoles se estará disputando la final de la Copa Libertadores 2017 en el partido de vuelta entre Lanús (Argentina) y Gremio de Porto Alegre (Brasil).
El primer partido (Ida) ya lo perdió Lanús por 1-0, dándole la ventaja al conjunto brasileño, pero los argentinos no pierden las esperanzas e intentarán reverter el resultado.
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Como es costumbre en las finales de la Copa Libertadores, no habrá "gol de visitante", por lo que de permanecer un empate a goles se le otorgará la ventaja al al equipo con mejor saldo de goles.
Lanús juega su primera final en las Libertadores y anhela poder llevarse su primera copa.
"Es una final, las finales se ganan. Nos costó mucho llegar hasta aquí, el equipo está bien y es un resultado que se puede revertir", señaló el pasado lunes el entrenador de Lanús, Jorge Almirón.
"Es un gol (de ventaja), tenemos que tener paciencia y trabajarlo bien. Seguramente el estadio va a estar lleno, va a ser una fiesta y el equipo va a estar a la altura de la final", añadió.
Gremio en cambio va en búsqueda de su tercer título (1983, 1995) y el director técnico Renato Gaúcho mantendrá casi toda la plantilla con la que venció a los granates.
"Estamos bien preparados para este momento. Estamos trabajando, pensando y soñando con la Copa. Confiamos en nuestro potencial y nuestro trabajo colectivo", expresó el delantero Ramiro.
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El árbitro principal será el paraguayo Enrique Cáceres y en las líneas los también paraguayos Eduardo Cardozo y Juan Zorrilla.
El encuentro se llevará a cabo este miércoles a las 20H45 ante los 40.000 hinchas de Lanús en la "Fortaleza", su estadio ubicado a 10 km al sur de Buenos Aires.