Figuras históricas como Hakeem Olajuwon, Patrick Ewing, Gary Payton, Karl Malone y Charles Barkley ya jugaron en México alguna vez. ¿Por qué no soñar con un partido de los Golden State Warriors de Stephen Curry, Kevin Durant y compañía?
Si bien es difícil que los Warriors visiten México, la posibilidad le parece atractiva al entrenador del cuadro californiano, Steve Kerr.
"Sí, me encantaría. Me gusta jugar fuera de Estados Unidos. Ya jugué en Europa y China y es divertido jugar en un ambiente diferente y frente a una afición diferente. Sé que los aficionados en México aman la NBA. Disfrutaría jugar ahí", dijo el coach de Golden State en una conferencia telefónica.
Los Warriors ya visitaron México en 2006, mucho antes del despertar de la franquicia para convertirse en el mejor equipo de la NBA. Fue un partido de pretemporada contra los Denver Nuggets de Eduardo Nájera en Monterrey. Hoy ya no queda ningún jugador de ese roster en Golden State; Matt Barnes, quien fue campeón todavía en junio de este año antes de retirarse, formaba parte de aquel equipo.
Antes, Golden State enfrentó a los New Jersey Nets (hoy en Brooklyn) en un duelo de pretemporada en la Ciudad de México en 1999.
Este año ya vino el MVP reinante de la liga, Russell Westbrook, para jugar un partido de temporada regular, sin embargo, el Oklahoma City Thunder no está al nivel de los campeones defensores. Para que los Warriors jueguen en México una vez más, seguramente tendría que se un encuentro de visita.
SERÁ MÁS DIFÍCIL DEFENDER EL TÍTULO, SEGÚN KERR
Por otro lado, Kerr comparó su etapa como jugador en los Chicago Bulls con la situación que viven actualmente sus Warriors, que han sufrido lesiones de jugadores importantes, entre ellos Stephen Curry, quien tiene un problema en un tobillo y no podrá jugar el partido de Navidad ante los Cleveland Cavs de LeBron James.
"Creo que hemos hecho un buen trabajo. Hemos ganado partidos y lidiado con las lesiones, eso es lo que debes hacer cuando has estado en las Finales varios años seguidos. Solamente será más difícil. Siento que como jugador en los 90 en Chicago, el tercer año fue mucho más difícil que el tercero".
Kevin Durant ha mostrado una faceta nunca antes vista esta temporada. Apenas a principios de diciembre sufrió su tercera expulsión de la campaña luego de un enfrentamiento con DeMarcus Cousins, de los New Orleans Pelicans. Ante los arranques de furia de su estrella, Kerr se mostró tranquilo y confiado en que no volverá a pasar.
"No me preocupa. Pienso que Kevin pasó dos semanas en las que estaba muy frustrado. las cosas no le salían bien y se estaba enojando. Yo tuve el mismo problema. Cometí dos faltas técnicas en ese periodo y me estaba frustrando. Creo que desde entonces, hemos hecho un mejor trabajo como equipo al no quejarnos con los oficiales y enfocándonos en jugar".
Sobre los rivales a vencer esta campaña, Kerr mencionó a los más obvios como Celtics, Cavs, Spurs y Rockets, pero también les puso la etiqueta de caballo negro a los Raptors.