Cristian Nasuti clava su mirada en el césped de la cancha alterna de la sede del Deportivo Cali en Pance, deja volar su mente, suspira, al tiempo que hace rechinar sus dientes en una manifestación de alteración.
El defensa argentino de 32 años (6 de septiembre de 1982) trasladó su mente al Antonio Vespucio Liberti. Se imaginó a River Plate saltando a la cancha, al público rugiendo en las tribunas; alcanzó a escuchar el sonido de la pirotecnia y se imaginó la tensión de los jugadores.
“Los jugadores de River tienen que aislarse del entorno, estar totalmente concentrados. Todos los hinchas les van a exigir que se ganen la Copa Libertadores, los periodistas no pararán de hablar de ese partido. Hay que tener mucho equilibrio mental y emocional. Son muchas cosas complicadas”, manifestó ‘el Tano’ Nasuti en charla con AS Colombia.
Nasuti, también retrocedió hasta cuando pasó de convivir con las necesidades del Platense, que competía en el campeonato Nacional B, hasta que fue cedido a préstamo a las reservas del River Plate, donde estuvo durante un año y medio y compartió con Javier Mascherano, Javier Ludueña, Fernando Cavenagui, entre otros, posteriormente convertidos en grandes futbolistas.
A la distancia, la previa de la finalísima de la Copa Libertadores le genera ansiedad, siente calor; recuerda asombrado la vez que un aficionado perdió la vida en la tribuna del estadio de River, luego de que Nasuti convirtió el gol, en el minuto 93, que igualó la serie de la semifinal de la Libertadores frente a Boca Juniors y forzó al lanzamientos desde el punto penal –Boca ganó la serie y luego perdió la final frente al Once Caldas-.
“Fue un partido de película. Al otro día fuimos a entrenar, porque teníamos que definir el torneo local, me agarra un hincha de River en el pasillo del club, me dice, ‘Tano, te quiero agradecer porque dejaron todo en la cancha, pero lamentablemente cuando hiciste el gol, a mi viejo, que estaba en la tribuna conmigo, le dio un ataque en el corazón y murió’. ¡Imagínate cómo viven el fútbol! Quedé congelado”.
Nasuti, también fue un hincha ‘enfermo’ por el Independiente de Avellaneda, una pasión que heredó de su padre. “Vi jugar a Bochini con la 10, disfrutábamos el fútbol. De Independiente, aún tengo una camiseta chiquita que la heredó mi hijo menor, Francesco”.
En Platense jugó durante 11 temporadas y debutó a los 17 años siendo dirigido por el polémico Caruso Lombardi. Nasuti, también jugó en el Morelia mexicano, en Banfield de Argentina, en los griegos Aris Salónica y AEK Atenas, en Libertad de Paraguay y en el Emelec de Ecuador.
Sin embargo, su más genuino sentimiento lo conserva hacia el River Plate, con el que logró dos campeonatos locales, en 2004 y 2008, siendo dirigido por Leonardo Astrada y Diego Pablo Simeone, en forma respectiva.
“Simeone vive el fútbol como lo ves en la tele, siempre fue así, pasional, detallista, no se le escapa nada. Sabe cómo hacer que el jugador de más del ciento por ciento. No hay nada rutinario con ‘el Cholo’… jugábamos el domingo, entrenábamos el lunes y el martes te daba libre. Marcaba la cancha en los entrenos y cada grupo hacía cosas diferentes. Tiene un cuerpo técnico dinámico, muy al estilo europeo. Y ‘Leo’ Astrada es un tipo que conoce el pasillo River. Es importante para el manejo del grupo porque conoce la convivencia en el vestuario”.
Tigres de México y River Plate igualaron 0-0 la pasada semana en la ida de la final de la Copa Libertadores en el estadio Municipal de Monterrey. Este miércoles jugarán la vuelta en cancha de River.
“Para mí va a ser más difícil este partido que el anterior. River tiene que salir a proponer y tendrá un rival que sabe jugar de visitante, con jugadores de mucho prestigio. Va a ser una linda final, mejor que la del juego de ida”, sostuvo Nasuti.