El Crystal Palace frenó al Manchester City en el penúltimo duelo del año de la Premier League (0-0) y dejó al conjunto de Pep Guardiola sin el récord de diecinueve victorias seguidas que, en las grandes ligas europeas, ostenta el Bayern Múnich desde el 2014.
Fue con un penalti en el 90 cometido por Raheem Sterling que lanzó el serbio Luka Milivojevic y que detuvo con los pies el portero brasileño Ederson.
Fue la mejor oportunidad de un partido sin excesivas ocasiones, dominado por el líder, el Manchester City, que tuvo sus mejores ocasiones en las botas del argentino Sergio Kun Agüero, suplente al principio pero que sustituyó al lesionado Gabriel Jesús en el minuto 23.
El cuadro de Pep Guardiola echó de menos a David Silva, que ni siquiera entró en la convocatoria. No funcionó igual sin el español. Demasiado espeso en el ataque se estrelló permanentemente ante la resistencia del cuadro local, centrado en sellar la permanencia y que lleva ya tres encuentros sin ganar.
Guardiola recurrió a Raheem Sterling en la segunda parte y a Yaya Toure. Nada le funcionó y terminó sin marcar el City, que aventaja en catorce puntos al Chelsea, segundo en la tabla ahora.