ORLANDO, Florida - - La “lenta carga” de Isaiah Thomas, tal y como la denominó el propio jugador, se ha incrementado de forma significativa durante esta semana. El diminuto base ha utilizado dicha frase en incontables publicaciones en redes sociales mediante una etiqueta, utilizada para describir su proceso de rehabilitación tras la lesión del labrum desgarrado en su cadera izquierda que lo mantuvo fuera de la acción de la NBA por siete meses y medio. Ahora, tras su ausencia de los tres últimos partidos de las finales de la Conferencia del Este y los primeros 36 cotejos de la presente temporada regular, Thomas está de vuelta.
Thomas hizo su debut con los Cleveland Cavaliers este martes en la suplencia, anotando 17 puntos en 19 minutos para así aportar al triunfo de su quinteto sobre los Portland Trail Blazers. Será titular por primera vez con los Cavaliers este sábado en el enfrentamiento contra el Orlando Magic, asumiendo el puesto en el cual José Calderón fue una solución provisional. Su restricción de minutos será reducida, aunque de forma progresiva.
“No creo que se vaya a sentir mucha diferencia”, afirmó Thomas este viernes luego de preguntársele si le afectaría el jugar cinco minutos extra. “Estoy tratando de convencerles a fin que juegue un poco más. Especialmente (porque) tuve buen desempeño en el primer partido en el cual jugué, por ello (confíen en mí) les estoy diciendo que me dejen jugar un poco más porque en mayor medida estoy bien. Tengo un poquito de dolor y espero tener ese dolor y sentirme algo tieso. Sin embargo, en mayor medida, mi cuerpo se siente bien”.
¿Cuán bien? Si bien Thomas es un hombre orgulloso, el dos veces All-Star admite que no está de vuelta a plena capacidad.
“Hombre, un 80 (por ciento) aproximadamente”, responde al interrogársele por una medida de su sensación actual del nivel de su juego. “Pues, no estoy en forma bajo ninguna circunstancia. Comparado a cómo quisiera estar físicamente hablando, no tengo tanto poder o explosividad como quisiera. Pero eso llegará con muchas repeticiones (en prácticas) y repeticiones en los partidos. Entonces, estoy cerca, pero probablemente me tome un tiempo para sentirme como estuve durante la pasada temporada”.
Los Cavaliers no sienten afán alguno de quitar el límite de tiempo de juego impuesto sobre Thomas. Tampoco dirán una fecha en la cual Thomas ya no tenga que verse restringido a participar en sólo uno de los partidos que tengan programados en noches consecutivas, situación que lo mantuvo fuera del anticipado choque del miércoles, cuando los Cavaliers viajaron a Boston.
El equipo muestra cautela con respecto a emitir diagnóstico sobre las semanas finales de la rehabilitación de Thomas, mientras aumentaba la especulación con respecto a una fecha tentativa para su primer partido. El equipo anunció durante el inicio del campamento de entrenamientos que manejaba la fecha del 1 de enero para el regreso de Thomas a la cancha, y su vuelta se hizo efectiva el día 2, cuando los Cavaliers jugaron su primer encuentro del 2018. A pesar de esto, hubo ciertas voces externas al equipo que se preguntaban el por qué Thomas se mantuvo ausente el 25 de diciembre, para el choque ante los Golden State Warriors y el 3 de enero, fecha en la cual Cleveland se enfrentó a los Celtics.
El propio Thomas admitió en Boston durante la noche del miércoles: “Siempre quise jugar este partido, pero pensé que estaría de regreso un poco antes para así poder estar presente”.
Desde este momento, los Cavaliers no quieren trazar un cronograma exacto para ponerle punto final a la restricción de minutos que tiene Thomas, ni para cuándo podría jugar ambos compromisos de jornadas consecutivas. El equipo coloca esa responsabilidad en las manos de su staff de preparadores físicos y consideran que el proceso diario será fluido, de acuerdo a cómo Thomas sienta que su cuerpo está respondiendo.
“¿Cuándo será? No lo sé”, expresó el entrenador de los Cavaliers Tyronn Lue en respuesta a las interrogantes con respecto al momento en el cual Thomas estaría al 100 por ciento. “Quiero decir que será cuando se sienta muy bien. No tengo idea alguna de cuando pueda ser. No tomo esa decisión. Ellos tienen su forma de hacer las cosas, lo que ellos consideren que funcionará, así que simplemente me mantengo fiel a eso”.
¿Qué debe mostrar Thomas a fin de poder jugar más?
“Lo que digan (los preparadores físicos), seguiremos pues, saben, incrementando de forma lenta”, dijo Lue. “Por eso, en este momento no lo sé”.
Thomas tampoco está apurando las cosas. Este viernes, Thomas afirmó que, incluso tras su regreso a la cancha, el jugador y George Sibel, terapista físico de los Cavaliers que ha sido parte fundamental en el proceso de regreso de Thomas, están asumiendo las cosas de manera similar a un maratón de seis meses de duración. El final de esa carrera, aspiran, no será sino hasta las Finales de la NBA el próximo junio. Thomas desea, sin embargo, hacer un sprint hacia la meta.
Los diagnósticos iniciales son alentadores.
Tras haber jugado en una partida contra el equipo afiliado de los Cavaliers en la G League, el Canton Charge, y dos contra sus compañeros de Cleveland antes de su debut contra los Blazers, el cuerpo de Thomas respondió tal y como se esperaba.
“Hay cierto dolor en la cadera, pero eso se debe a que no he jugado en tanto tiempo y aparte, estoy cuidando mi cuerpo con masajes y cosas así”, afirmó Thomas. “Mientras me sienta más cómodo al jugar partidos de baloncesto, pienso que tendré menores molestias”.
Thomas jugará este sábado contra el Magic, tendrá un día de descanso y jugará este lunes contra Minnesota, si no se producen inconvenientes. Luego tendrá otros dos días de reposo antes de jugar el jueves contra Toronto. Cuando los Cavaliers pongan fin a su gira de cinco encuentros el viernes en Indiana, estará fuera de acción, al mantenerse en pie las restricciones para jornadas consecutivas.
Cuando los Cavaliers vuelvan a jugar en fechas consecutivas (el 30 de enero contra Detroit y el 31 ante Miami), es probable que las cosas hayan cambiado. Cuando los Cavaliers regresen a Boston el 11 de febrero es probable que, tal y como afirma Thomas, “espere y entonces dé todo un espectáculo”.
Luego de su primer partido, Thomas declaró estar preparado para volver a jugar durante 40 minutos (mostró promedio de 33.8 minutos con Boston en la pasada temporada y 34.7 minutos en los playoffs). La única razón por la cual puede decir eso, sin embargo, es la dedicación que muestra 180 minutos antes del pitazo inicial, cuando inicia su rutina de activación de caderas en la arena.
“Sigo muy pendiente de mi rehabilitación”, afirma Thomas. “Recibo masajes todos los días, y permanezco pendiente de todo. Así van a ser las cosas por el resto de mi carrera. Incluso, cuando me sienta al 100 por ciento, tengo que seguir pendiente de activar mis caderas y hacer cosas así”.
Thomas aspira que toda esa “lenta carga” fuera de la cancha resulte en mayor velocidad dentro de ella.
“Cuando saltaba tratando de encestar, cuando hacía esos movimientos, sentí que… Me sentí veloz allí”, dijo Thomas, con respecto al partido contra Portland. “Y me he sentido así por largo tiempo. No obstante, hubo ciertas cosas que hice en las cuales pude pensar: ‘Muy bien, me siento confiado que ahora puedo hacer eso’. Y me podía mover. En mayor medida, me sentía tal y como quería. Solo que, no me siento tan poderoso como lo fui la temporada pasada. Eso me tomará tiempo, y estoy consciente de ello”.
“En conclusión, pronto estaré bien”.