José Marina quería morirse. En su primer partido de titular en el año, la maña fortuna y los nervios hicieron que cometa un tonto penal y ponga en aprietos a todo Alianza Lima. El defensor hizo una jugada torpe y tocó la pelota con la mano de manera increíble.
Penal y el jugador no quería ni mirar la jugada. No obstante, Daniel Prieto le dio toda la confianza y con una sensacional atajada evitó lo que pudo ser un duro golpe para el equipo y para el joven Marina.
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Daniel Prieto nunca cerró los ojos y se estiró al máximo para desviar la pelota al tiro de esquina. El golero ya venía siendo la gran figura del compromiso.
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Alianza Lima sufrió, pero al final consiguió evitar lo que pudo ser el empate de Ayacucho FC en Huanta. Ahora, los íntimos deberán cuidar el resultado.