Los partidos de ida de los dieciseisavos de final de la Europa League disputados ayer se convirtieron en un excelente banco de pruebas para la Juventus. Los bianconeri, que nunca descuidan la búsqueda de nuevos refuerzos, desplegaron sus tentáculos por el continente y establecieron un especial seguimiento sobre al menos seis jugadores que anoche acudieron a la cita europea.
El choque que concitó especialmente la atención de la vecchia signora fue el disputado en el Signal Iduna Park por Borussia Dortmund y Atalanta. En él, los espías siguieron muy de cerca las evoluciones de tres futbolistas visitantes: el lateral Leonardo Spinazzola (24 años), el central Mattia Caldara (23) y el centrocampista Bryan Cristante (22).
Asimismo, un representante de la Juve también se personó en el Arena Nationala de Bucarest para presenciar el Steaua-Lazio y estrechar la vigilancia sobre un ya clásico objetivo de la entidad, el centrocampista serbio Sergej Milinkovic-Savic (22 años). Igualmente, otro de los ojeadores realizó un seguimiento al medio portugués William Carvalho (25) en el Astana-Sporting de Portugal.
Completa este sexteto de futbolistas espiados, el belga Yannick Ferreira Carrasco. El extremo, de 24 años, no partió como titular en el choque que medía al FC Copenhague con el Atlético de Madrid, pero al menos gozó de algo más de 30 minutos en la segunda parte para lucir sus cualidades ante los ojeadores.