Aunque faltan más de ocho meses para el Gran Premio de México de Fórmula Uno, la preventa de boletos ya comenzó y las entradas estarán disponibles para el público a partir del jueves, con el objetivo de sumar el cuarto lleno en fila, desde que la máxima categoría regresó al Autódromo Hermanos Rodríguez.
En la suma de los tres eventos anteriores ha habido más de un millón de aficionados durante los nueve días y el año pasado, a pesar de registrar una ligera caída en la asistencia del viernes, fue la tercera competencia con más personas en la campaña, solo por detrás de la de Canadá y Gran Bretaña.
La meta es repetirlo y para ello la organización creó un programa de fidelidad, similar al que utiliza la NFL o la NBA en los duelos que se disputan en el país.
“Funcionó muy bien, tuvimos cerca de treinta y tantos mil registros de Stay F1rst, estamos con este tipo de programas para los aficionados de Fórmula Uno como especialistas que son, que tengan una ventaja sobre el que nunca ha ido, premiar su constancia y que nos hayan favorecido con hasta tres años de asistencia”, señaló a La Afición Federico González Compeán, director general del evento.
Uno de los enfoques para este cuarto GP es precisamente el de los aficionados a la máxima categoría que han estado en los años anteriores en las gradas y que disfrutan del automovilismo, más allá de lo que sucede alrededor del circuito.
“Hay fanáticos que son especialistas en la materia y quieren una fila y un asiento en particular porque es el que les permite ver una recta y cómo se aproximan los coches después de alguna curva, pero también tenemos un nuevo público que le queremos abrir la puerta a este deporte y necesita otros incentivos”.
La otra parte del interés de la organización es la de captar nuevos seguidores del serial, más allá que la mayoría de los asistentes (entre 60 y 70 por ciento, según estimaciones) son quienes han asistido a los Grandes Premios previos.
“Está aquel que ya fue el año pasado y quiere repetir, pero todavía no alcanza a entender por qué son tantos números en las pantallas, y todos (los organizadores) deberíamos ir por un público nuevo, se nota en el resto de las carreras que hace falta gente, hemos tenido la fortuna que aquí no, pero con los años debemos procurar un nuevo público, no solo el conocedor, sino uno que en el futuro se convierta en ello”.
La Fórmula Uno registró un incremento en la asistencia en 2017 de 8 por ciento respecto al año previo, a pesar de que hubo algunas fechas, como la de Estados Unidos, que tuvo una caída de casi 12 mil espectadores; es por ello que el nuevo dueño de la categoría, el Grupo Liberty Media, quiere sangre nueva en las tribunas.
“Que tengamos más aficionados y nuevos, será una buena noticia, en el mundo hacen falta más, es una de las tareas y compromisos que la F1 está viendo como área de oportunidad, nosotros tenemos tres GP agotados, pero veremos conforme madure la carrera, no es lo mismo hoy que el año 15, necesitamos mejorar las experiencias y el espectáculo dentro de la pista”.
La competencia del año pasado tuvo un sabor distinto porque se llevó a cabo un poco más de un mes después del terremoto del 19 de septiembre que sacudió la capital, entre otras ciudades.
“Seis semanas antes del GP no sabíamos si habría o no, el autódromo estaba en buenas condiciones y lo supimos a las cuatro horas del temblor por los estudios que hicimos, pero la ciudad estaba con problemas de muchas índoles y con el dolor de la situación, así que enviar el mensaje de estamos de pie fue muy importante”, afirmó.
González Compeán compartió el secreto para que esta cuarta carrera en México genere la misma expectativa que el primer día, sin el factor de la novedad.
“El público está teniendo una buena experiencia, en esta coordinación con las autoridades para que le sea sencillo llegar al autódromo, con tres estaciones de Metro cerca, con camiones, logramos que entienda que es mejor llegar en transporte público. La experiencia en la pista y fuera de ella ha hecho que nuevos aficionados nos visiten y digan, ‘no está mal esta experiencia’, y desde luego el ambiente en las gradas es fundamental”.