Con un tanto de penal de Miralem Pjanic (m.75), Juventus confirmó su ventaja de la ida, donde también se había impuesto por el mismo marcador, ante el Atalanta (1-0), y se clasificó para la que será su cuarta final consecutiva de la Copa de Italia.
La vuelta de las semifinales, disputada en el Alianz Stadium de Turín, y disputada en muchos minutos de su primera mitad bajo la nieve, resultó entretenida pese a dejar su mayor emoción a bien entrada la segunda parte.
Así, de salida se vio a un Atalanta en busca de anotar un tanto que paliará su desventaja de la ida, y un conservador Juventus, sin el Pipita Higuaín (autor del tanto del triunfo en Bérgamo) en la convocatoria y con Paolo Dybala en el banquillo, que intentaba administrar su ventaja y sorprender al contragolpe la osadía rival.
La segunda mitad fue más interesante. El Atalanta volvió a exhibir osadía y dispuso de la gran ocasión que buscaba. El argentino “Papu” Gómez (m.64) se fue de su marcador y, desde mitad del campo juventino, elevó el balón sobre la salida desesperada de Gianluigi Buffon.
Y, en el minuto 75, en un forcejeo dentro del área del Atalanta, el colegiado señaló con la pena máxima un agarrón sobre Matuidi, ante la sorpresa de los jugadores visitantes. Ejecutó el lanzamiento Pjanic, que puso el 1-0 en el marcador (m.75).