Todo comenzó en agosto del 2016. Un joven Paul Pogba brillaba en la Serie A, dentro del equipo comandado por Massimiliano Allegri: Juventus. Al lado de Paulo Dybala y Juan Cuadrado, todo era color de rosas. Sin embargo, tras convertirse en el fichaje más caro del mundo, todo cambió.
Hoy a casi dos años de aquella transferencia al Manchester United, el francés no parece estar a la altura de lo que pretende José Mourinho, quien opta por dejarlo en el banco y darle prioridad al pequeño canterano Scott McTominay.
Ante la inminente situación que vive el galo, según los medios británicos, su agente Mino Raiola ya se puso en campaña para sacar a su muchacho de allí y hacer que vuelva a brillar.
Con 19 años, Pogba llegó a la Juve y, en las cuatro temporadas que participó, su juego fue de menos a más. Consiguió cuatro títulos de liga, dos Copa Italia y tres Supercopa Italia. Quizás, esos trofeos colectivos, y su desempeño individual, hicieron que el Manchester United pagase 129 millones de dólares, cifra que lo convirtió en el jugador más caro de la historia en 2016.
Tras un año en el que disputó 51 partidos, siendo parte de la obtención de la Copa de la Liga y de la Europa League, el francés ya no cuenta con el apoyo de José Mourinho, quien, por ejemplo, lo dejó afuera del último partido trascendental ante el Sevilla, por el pase a cuartos de final de la Champions League.
En esta temporada, el futbolista de 25 años solo completó 18 partidos, y un notable bajón en su rendimiento obligó al luso a pensar en otras alternativas en su puesto. Fue así que recurrió al canterano de 21 años Scott McTominay.
"McTominay merece más de lo que está recibiendo. Tal vez es porque es ese tipo de niño con un corte de pelo normal, sin tatuajes, sin grandes coches, sin grandes relojes… un niño humilde que llegó al club cuando tenía nueve años", aseguró Mourinho sobre el joven mediocampista, y agregó: "Este curso ya ha jugado, no sé, 7 u 8 veces los 90 minutos".
A su desafortunado presente, también se le sumó la llegada de Alexis Sánchez, quien se convirtió en el mejor pagado de la plantilla, relegando al francés al segundo escalón.
El ex Juventus estaba convirtiéndose en una de las más grandes promesas de Francia y siente que debe volver a codearse con nombres como el de Neymar o el de Eden Hazard, entre otros, y es por ello que Raiola comenzó a moverse para que su cliente vuelva a la elite mundial.