Zinedine Zidane llega a Turín como entrenador del Real Madrid para medirse a la Juventus. Sus dos casas deportivas lejos de Francia frente a frente. Un duelo que ya ha vivido desde ambos lados. Una historia que pudo ser distinta si el técnico marsellés hubiera aceptado alguna de las propuestas del Inter o Milan en 1996, en su último año en el Girondins de Burdeos.
Alineaciones y cómo ver el Juventus - Real Madrid
La fama de Zidane en el Girondins no dejaba de crecer en el viejo continente, haciéndose eco en Italia, el mejor mercado europeo en aquel momento. El Inter se puso manos a la obra a través del gallego Luis Suárez y el Milan también se lanzó, máxime cuando fueron eliminados en la Copa de la UEFA por el conjunto de Burdeos con un estelar Zidane al mando de la nave gala. No fueron los únicos, el Barcelona de Cruyff tenía casi atado a 'Zizou', pero la marcha del tulipán del vestuario del Camp Nou esfumó tal posibilidad.
Las conversaciones ente Zidane e Inter nunca cristalizaron, al igual que con el Milan, todo lo contrario que con la ‘Vecchia Signora’, empeñada en llevárselo para Turín y convertirlo en un nuevo Michel Platini. Especialmente Gianni Agnelli, patrón por entonces de la Juventus, quien hasta tuvo que convencer al entrenador Lippi de que Zidane era la pieza angular de un futuro proyecto.
La maestría de Lippi y el talento de Zidane hicieron el resto, transformando aquel prometedor jugador en una estrella del fútbol de la que también sacaría provecho la selección de Francia, firmando su etapa más gloriosa, y también el Real Madrid, tanto en el césped como en el banquillo, desde donde sigue guiando a los blancos hacia la ansiada ‘orejona’.