Gimnasia no logra levantar cabeza y perdió ante Tigre un partido importante de cara a la temporada que viene. El equipo de Facundo Sava volvió a mostrar más falencias que virtudes contra un flojo rival que será directo en el semestre venidero y cosechó su cuarta derrota al hilo en lo que va de la Superliga.
El volantazo que dio Sava mandando a la cancha a algunos juveniles y rezagando a varios de los experimentados tampoco tuvo la respuesta esperada dentro de la cancha. El equipo fue liviano en ataque, se defendió mal y falló en demasía en la pelota quieta en contra, todos factores que lo llevaron a sufrir una justa derrota por 2 a 0 y que pudo haber sido más abultada.
En el inicio Tigre se adueñó de la pelota y manejaba los ritmos del partido, mientras que a Gimnasia le costaba recuperarla en la mitad de la cancha e indefectiblemente se abroquelaba atrás para cerrarle los caminos al rival, que tampoco era punzante.
Llegando al cuarto de hora, el Lobo emparejó las acciones y el dominio comenzó a ser repartido. Brahian Alemán buscaba ser la manija , alternando por la calle central del campo y ocasionalmente apareciendo como un tercer punta por el costado izquierdo, mientras que Contín se paraba de 9 y Ramírez como wing derecho.
De este modo se arrimó al arco de Chiarini por primera vez, con un centro bajo del “10” que no encontró receptor por el medio y murió en manos del arquero. De a poco, con sus armas, el equipo de Sava buscaba construir juego aunque no le era para nada sencillo.
Por su parte, el dueño de casa mostraba su mejor cara cuando la pelota pasaba por el tándem que componían Matías Pérez García y Diego Morales, aunque a los embates siempre les faltaba el último pase como para ponerse cara a cara con Alexis Martín Arias. En tanto, la pelota parada, a partir de una buena cantidad de faltas que cometía el mens sana para recuperar el balón, asomaba como otra arma factible para que el Matador amenace el arco tripero.
En media hora, la alternativa del juego comenzó a virar y el equipo de Ledesma volvió a manejar los hilos. Y si bien el local no era claro llegó a la apertura del marcador aprovechando esa falencia que mostraba Gimnasia para quitarle la pelota y llenarse de faltas cerca del área.
Es que en uno de los tantos balones detenidos, Jacobo Mansilla aprovechó una carambola en la que cinco defensores no pudieron despejar y desde el suelo, anotó el 1 a 0 ensayando una pirueta.
El albiazul, que hacía poco en ataque, respondió recién a los 38, con una buena de Eric Ramírez, de lo mejorcito del equipo, pero el buscapiés que ensayó no fue conectado por sus compañeros en el corazón del área chica.
Al rato, el mismo Ramírez, que hacía todo lo que podía por la derecha, metió un centro a la cabeza de Contín, pero el arquero Chiarini le ahogó el grito al centrodelantero con una estupenda atajada contra la base de su palo derecho.
Unos minutos antes y aprovechando el viento, Pérez García casi mete el segundo con un tiro libre desde muy lejos, pero el travesaño le dijo que no.
MAS CASTIGO EN EL COMPLEMENTO
Como si el 1 a 0 en contra y el flojo desempeño mostrado hubiese sido poco castigo para Gimnasia, su mejor jugador, Eric Ramírez, se iría a las duchas antes de tiempo en el amanecer del complemento. El delantero vio la segunda amarilla después de una falta por abortar un contragolpe tras de un tiro de esquina a favor y el equipo se quedó con diez.
A partir de la expulsión, los problemas del albiazul se acentuaron: se defendía mal y del mismo modo atacaba, un combo que parecía alejarlo cada vez más de un hipotético empate.
Por su parte, el Matador logró capitalizar esta laxitud de los comandados por Sava y contó con dos claras ocasiones, primero con Morales y después con Prediger pero ninguno de los dos le acertó al arco.
El Lobo pudo salir del asedio atinando con una reacción que sostuvo por unos minutos. Primero casi lo empata con un remate desde afuera de Alemán que Chiarini sacó al córner y después con otra pelota quieta en la que Canuto casi la mete en contra pero respondió nuevamente el arquero .
Claro que con Gimnasia apostado en campo contrario, el rival disponía de los espacios suficientes para apelar al contragolpe y contó con una catarata de situaciones que no lograba traducir en goles. Casi marca Federico González pero Martín Arias se quedó con el enfrentamiento mano a mano y también lo tuvo el ingresado Janson pero Guanini sacó en la línea.
Hasta que a los 38, el local no erró más y marcó el segundo mediante Diego Morales, que tuvo tiempo dentro del área para colocar el balón contra la base del poste derecho del arco de Martín Arias y liquidó el pleito.
Si bien el entrenador de Gimnasia probó moviendo un poco el banco con los ingresos de Faravelli antes del segundo tanto y de Franco Niell a posteriori, ninguno de los intentos surtieron efecto en el trámite y mucho menos en el resultado.
El Lobo volvió a perder y se le está haciendo una peligrosa costumbre. El equipo no levanta más allá de las pruebas de su entrenador y los puntos que está perdiendo le traerán un fuerte dolor de cabeza en el semestre próximo.