Adrián San Miguel en Liverpool: héroe, lesión insólita y terrible 'blooper' [VIDEO]

A sus 32 años, la vida de Adrián San Miguel tuvo muchos giros en menos de dos semanas. Primero pasó de estar sin equipo y entrenar por su cuenta en su natal Sevilla a recibir el llamado del propio Jürgen Klopp para reforzar al Liverpool. Luego, en su debut, le dio la Supercopa de Europa al equipo inglés atajando el último penal en la definición desde los doce pasos ante el Chelsea. Segundos después fue lesionado por un propio hincha de su equipo. Pero ahí no queda todo. El destino le tuvo preparado una nueva sorpresa.

Adrián, recuperado del golpe en su tobillo, fue titular esta mañana en el duelo ante el Southampton por la Premier League. Corrían los 82 minutos del segundo tiempo, Liverpool gana cómodamente 2-0, hasta que llegó el ‘blooper’ del portero. Recibió un pase de Van Dijk, controló y ante la presión del delantero rival quiso dársela a un compañero. El balón chocó en el atacante e ingresó al arco. El partido terminó 2-1 a favor de los ‘Reds’, pero muchos hinchas recordaron a Loris Karius.

La historia del arquero español parece sacada de una película de género cómico, pero no lo es. Pasó en la élite del fútbol. De todo lo que le pasó, lo más asombroso y curioso fue el golpe que recibió por culpa de un propio hincha. A propósito de ello, te contamos otras lesiones absurdas en el mundo del fútbol. Una más rara que otra.

-Un festejo desmedido-

Martín Palermo marcó 306 goles a lo largo de su carrera. Pero nunca un tanto le costó tan caro como el que hizo con la camiseta del Villarreal, allá por el 2001. El delantero argentino se rompió la tibia y peroné después de que cediese una valla de cemento que separa la tribuna de la cancha ante el ímpetu de los aficionados que festejaban un gol suyo. El ‘Titán’ estuvo fuera de las canchas por seis meses.

-Coche sin frenos-

En el 2012, el argentino Ever Banega era una de las figuras del Valencia. Un domingo, tras un entrenamiento con el equipo ‘Che’, el volante fue a una gasolinera. Al bajar olvidó activar el freno de mano y su auto empezó a desplazarse. Ever intentó frenarlo con el pie y sufrió la rotura de su tibia y peroné. Tras ‘autoatropellarse’, el sudamericano tuvo seis meses de recuperación.

-Un perfume demasiado caro-

Santiago Cañizares era uno de los porteros fijos para ir al Mundial de Corea y Japón 2002 con España. Sin embargo, a puertas del torneo más importante del mundo, el arquero intentó parar la caída de un frasco de perfume estando descalzo. Lo malo fue que los cristales rotos le seccionaron un tendón de un dedo del pie derecho y lo dejó sin Copa del Mundo. Su ausencia colocó a un jovencísimo Iker Casillas en la nómina.

-Un juego maldito-

Alessandro Nesta, recordado defensor férreo del AC Milan, se rompió el tendón de una muñeca durante un partido de Play Station. El central italiano, muy amigo de los videojuegos, tuvo que pasar por el quirófano y estuvo un mes de baja.

-Una llamada desafortunada-

Rio Ferdinand, ex capitán del Manchester United, reposaba tranquilamente en el sofá de su casa cuando el teléfono comenzó a sonar. El defensa inglés se estiró para coger el auricular y ese movimiento forzado le costó una pequeña lesión en la rodilla. Increíble pero cierto.