Olimpia enfrentaba al Flamengo por el Grupo 2 de la Copa Libertadores en el estadio Joao Havelange de Río de Janeiro. El Decano, entonces dirigido por el uruguayo Gerardo Pelusso, trató de ofrecer lucha, pero con los minutos el juego se puso cuesta arriba.
Darío Bottinelli abrió la cuenta en el primer tiempo, pero luego el astro Ronaldinho Gaúcho de penal, hoy detenido en Paraguay, y Luiz Antonio se encargaron de poner el lapidario resultado.
Corrían 75 minutos y el pleito parecía liquidado, cuando el delantero Pablo Daniel Zeballos se encargó de romperle el arco al portero rival y clavar un tiro libre en el ángulo para dar un fuerte estímulo a sus compañeros.
Luego, Luis Neri Caballero protegió con alma y vida un balón cerca del borde izquierdo del área grande, se acomodó y luego sacó un esquinado remate con pierna izquierda para establecer el 3-2 sobre 83 minutos.
Sin embargo, tras una gran jugada individual y pase de Maxi Biancucchi, apareció destapado el colombiano Vladimir Marín para sacar un misil con la pierna izquierda y emparejar las acciones sobre los 88 minutos.