Pese a estar “con toda la energía” para buscar su boleto a los Juegos Olímpicos de Tokio, ahora pospuestos para el 2021, Jacqueline Factos califica como la decisión “más inteligente” la adoptada por el Comité Olímpico Internacional (COI) de aplazar los juegos por un año debido a la pandemia del coronavirus, aunque para la karateca tricolor la medida obedeció a una presión mundial. La múltiple campeona y top ten en el ranking mundial, sigue su preparación en casa, desde donde cuenta -por vía telefónica- cómo vive el aislamiento decretado por el Gobierno Nacional ante la emergencia sanitaria, y el trabajo que cumple con el dominicano Dionicio Gustavo, su esposo y entrenador.
¿Cómo afronta la cuarentena?
Estoy tranquila y acatando las órdenes de permanecer en casa. Los deportistas por lo regular somos disciplinados. La verdad es que incluso sin cuarentena paso bastante tiempo en mi casa donde cuento con un espacio donde entrenar, con tatami incluido.
Cuando se le contactó dijo que estaba cocinando, ¿es por el encierro?
No (ríe). Cuido mucho mi alimentación y hago lo posible por comer en casa. Junto a mi esposo tratamos de mantener una dieta balanceada, no es raro que prepare la comida.
¿Cómo tomó la decisión del Comité Olímpico Internacional de aplazar los Juegos de Tokio?
Fue una decisión muy acertada, la más inteligente. Se hacía extraño que el COI dijera que sí se iban a realizar los Juegos este año, cuando veíamos que todo se desmoronaba y que no sería viable. Cuando conocí de la postergación sentí un alivio porque tenía preocupación de que mi preparación no fuera óptima, de que no estaba en igualdad de condiciones para pelear por un cupo olímpico. Ahora estoy más tranquila trabajando en detalles, entrenando y preparándome para cuando llegue el momento de competir.
¿Cree que fue la presión mundial la que le hizo postergar los Juegos Olímpicos al COI?
Aparentemente sí, porque se demoró muchísimo en tomar una decisión que debió ser tomada apenas se dictaminó (por parte de la Organización Mundial de la Salud), que el nuevo coronavirus pasaba a ser una pandemia. Desde ese instante muchas federaciones en el mundo cancelaron sus eventos. La NBA suspendió sus juegos, igual el béisbol, el fútbol y otros deportes, mientras el COI seguía empecinado en realizar los Juegos. No sé qué razones tenía, pero lo más importante debía ser el bienestar y la salud de nosotros los atletas, de los espectadores y de los organizadores. Al final, tomó la decisión más sensata.
El Comité Olímpico Ecuatoriano (COE) estaba alineado a la postura del COI, ¿qué opina?
El gran objetivo del COE es salvaguardar el bienestar de los atletas, así es que en un hipotético caso de que se hubieran realizado los Juegos yo sabía que no nos iban a enviar porque era ponernos en riesgo. Más allá de seguir un lineamiento, los comités de cada país pueden decidir, como lo hizo Canadá, que con antelación dijo que no enviaría a sus atletas.
¿Conversaban entre deportistas sobre esto?
Sí y todos estábamos de acuerdo con la suspensión. Deportistas con más experiencia pedían lo mismo porque sabemos que entrenar en casa no es nada, es solo para mantenerse activo, no se compara con las exigencias para ir a unos olímpicos.
Aún no está clasificada a los Juegos de Tokio, ¿cómo pensaba alcanzar el cupo?
En el karate (deporte que se estrenará en Juegos Olímpicos) se tienen dos instancias. La una es por la vía del ranking mundial donde clasifican las cinco primeras por división. Estoy décima en los 61 kg de kumite (combate), que es una buena posición, pero las plazas olímpicas son muy reducidas, solo hay 10 cupos por categoría. La otra opción y a la que apuntaba con fuerza era el preolímpico que clasifica a cinco más.
¿Qué torneos no disputó por esta emergencia?
Dos copas del mundo, en Marruecos y Madrid, el preolímpico en París, y asumo que también se va a cancelar el Panamericano, que iba a ser en mayo, en Costa Rica.
A los Juegos del 2021 llegará con 35 años, ¿será ese su mejor momento?
Pienso que sí. Combino la madurez, el conocimiento de mi cuerpo, la personalidad y de cómo enfrentar los retos.
Tiene un buen estado de ánimo, pese a la coyuntura.
Trato de ser muy positiva. Pienso que si ya estamos viviendo con el coronavirus tenemos como opción afrontar la situación. Quizá siempre se buscó más tiempo para estar con la familia, y ahora se lo tiene. (D)
Entrenar en casa es solo para mantenerse activo, eso no se puede comparar con las exigencias que se requieren para ir a unos olímpicos
Jacqueline Factos, karateca ecuatoriana