Con “pérdidas enormes” ante la crisis que generó la paralización de la LigaPro a causa del coronavirus, en Liga de Quito se abre la posibilidad de negociar jugadores para evitar un desajuste financiero.
“El presupuesto se está descalabrando y cuando eso pasa el equipo no tiene capacidad de pago para sus jugadores, proveedores, no puede pagar pasivos en bancos y la planificación se empieza a romper”, dijo el directivo Esteban Paz a Mundo Deportivo.
Ante la falta de ingresos por taquillas, un rubro que por la realidad sanitaria mundial no tendrían los clubes en lo que resta de la temporada, una opción es “la venta de los contratos de jugadores” adelantó Paz, con la aclaración que no podrían ser “ventas bajas” para poder suplir la pérdida del jugador.
“Es el momento de una reducción planificada y urgente, caso contrario podemos tener problemas severos en la parte económica y eso podría reproducir temas que luego afecten en la parte deportiva”, señaló.
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Con un presupuesto de 20 millones de dólares para esta temporada, el no recibir ingresos “causa problemas severos” en las cuentas de los universitarios.
“Hemos hecho lo posible para sostener el equipo y para pretender tenerlo como está, haremos un esfuerzo mayor, porque si queremos competir en alta gama debemos tratar de mantener el equipo, pero tenemos que tratar de encontrar un balance en las decisiones que afecten lo menos posible en la parte deportiva”, comentó el directivo azucena.
Durante la paralización, Liga no hizo reducción de sueldos a su plantilla, la fórmula usada fue la retención de una parte de los salarios, con lo que ha logrado mantenerse al día; sin embargo, “retenciones son retenciones, son pasivos que se generan y hay que pagar en algún momento, porque no se han recortado contratos”.
Posibles salidas
Retomar negociaciones por jugadores como el central Franklin Guerra, el volante Jhojan Julio, y el atacante uruguayo Rodrigo Aguirre estarían en planes para que Liga pueda solventar la crisis.
De estos, el charrúa es el que más complica a la economía alba. “Estamos en un problema severo porque tenemos que seguir pasando cuotas altísimas a Udinese (Italia), por eso la aspiración es que tenga buena exposición y podamos tener una negociación viable que nos beneficie, que nos permita pagar la deuda contraída con él, y que nos quede un superávit importante, pero si no se juega no se puede hacer nada y cualquier oferta que llegue va a ser por un valor menor”, lamentó Paz.
Por Guerra y Julio “se habló mucho pero no se concreta nada”, dijo Paz. “Esperamos que cuando empiece a moverse la actividad internacional podamos tener alguna oferta que nos permita resarcir un poco las deudas y tratar de balancear el barco porque si dejamos que el peso de los pasivos y de las deudas con jugadores lo vaya hundiendo, puede complicar de tal forma que no se pueda resurgir”, apuntó el directivo.
En busca de ese equilibrio en sus finanzas, Paz habló de tomar decisiones que afecten "positivamente" el entorno del club. “Sabemos que debemos perder algo en la parte deportiva, pero tenemos que ganar en lo más lógico que es la parte económica para poder sostener esto”, concluyó. (D)