Manchester United , uno de los clubes más emblemáticos de la Premier League , atraviesa un momento singular. Si bien ocupa el quinto puesto, con 29 puntos, está bastante lejos del sorpresivo líder, el modesto Leicester (38). En las últimas semanas, los resultados entraron en declive, y la formación conducida por Louis van Gaal apenas cosechó dos de los últimos doce puntos en juego: empates contra Leicester (1-1) y West Ham (0-0), y sendas derrotas contra Bournemouth (1-2) y Norwich City (1-2).
Los rumores no tardaron en llegar, y según la prensa británica, Van Gaal tiene poco margen de acción. El futuro del holandés al frente del United quedará expuesto en los próximos partidos, con visita ante Stoke City el sábado próximo, en el tradicional 'Boxing Day', y apenas un par de días después, en el duelo contra Chelsea , otro grande sumergido en la irregularidad. Si a Van Gaal el crédito se le termina, parece que el reemplazante ya tiene nombre y apellido: José Mourinho , despedido hace un par de días precisamente del club con sede en Stamford Bridge.
Si bien Van Gaal recibió un voto de confianza hace dos semanas, los magros resultados desde entonces volvieron a encender las dudas entre los directivos en Old Trafford. Según el diario Daily Mail, Mourinho señaló a sus amigos que "hay ofrecimientos que no se pueden rechazar". Al mismo tiempo, se sabe que hombres clave de Manchester United, como Sir Bobby Charlton y el ex director ejecutivo David Gill no están muy convencidos por el perfil alto de Mourinho, envuelto en escándalos diversos en su última etapa en Chelsea.
De todos modos, se prevé que la última palabra sobre el desembarco de un nuevo entrenador será tomada por el director ejecutivo Ed Woodward y la familia Glazer, dueña del club, con el asesoramiento de Gill y de Sir Alex Ferguson, otra leyenda de la entidad. Del lado de Mourinho, el portugués anunció que tiene pensado seguir viviendo en Inglaterra y no contempla pasar mucho tiempo sin entrenar, por lo que todo parece indicar que espera una oferta de un club de primer nivel.
Otra variante posible en el United es que, si Van Gaal es despedido, Ryan Giggs asuma como entrenador interino hasta el final de la temporada, lo que permitiría evaluar mejor el nombre del director técnico para mediados de 2016, mientras en Old Trafford parecen tener claro que sus rivales y vecinos de Manchester City contarán nada menos que con 'Pep' Guardiola al frente de la formación.
Sin embargo, hasta el momento lo único concreto es que el exitoso entrenador español dejará Bayern Munich a mediados de año, pero todavía no hay certezas sobre su futuro, más allá de los fuertes rumores que lo vinculan con el City. Un argumento favorable a esta situación es la afinidad que Guardiola tiene con el director deportivo de la entidad, Txiki Begiristain, con el que ya trabajó en Barcelona.
jld/jt.