No hace un mes que Splatoon llegó a las estanterías de los comercios. Hacía 14 años que el equipo de “Análisis y Desarrollo” de Nintendo, encargados de crear, cuidar y mantener vivos a los personajes de la compañía, no presentaba ninguna criatura nueva. El 29 de mayo se presentaron en sociedad los Inklings, seres que se transforman en calamar para avanzar más rápido sobre el terreno. Veintiséis días después, las ventas de Splatoon han superado el millón de unidades vendidas en todo el mundo, según cifras internas de Nintendo. Esta cifra incluye más de 230.000 ejemplares físicos y digitales vendidos en Europa, más de 368.000 en Japón, más de 476.000 en América y 20.000 más en Australia.
Nintendo ha planteado poner patas arriba el género shooter a través de sus nuevas criaturas humanoides conocidas como Inklings, y prescindiendo de uno de los elementos más característicos de los shooter: la sangre.
El modo multijugador* de Splatoon enfrenta a equipos de cuatro jugadores online para ver quién es capaz de cubrir más terreno de juego con la tinta del color de su equipo.