Con dos goles anulados a través del VAR, el Liverpool (1º) empató 1-1 en su visita al Brighton (16º), que logró su gol en la prolongación, este sábado en la décima jornada del campeonato inglés, ofreciendo la posibilidad al Tottenham (2º) de situarse como líder en solitario.
Después de una primera parte en la que el árbitro anuló a través del VAR un gol a los Reds por un fuera de juego milimétrico (34) de Mohamed Salah, el vigente campeón de la Premier se puso por delante a la hora de juego con un tanto del portugués Diogo Jota, que acertó con un disparo raso y preciso.
De nuevo un fuera de juego señalado con el VAR supuso la anulación de un tanto de los Reds, en este caso de Sadio Mané (82), que había empezado el partido en el banquillo.
El Brighton, que en la primera parte rozó el gol en el 10, cuando Aaron Connolly falló un mano a mano ante Alisson, tuvo dos penales a favor. Primero en el 20, cuando el francés Neal Maupay lanzó fuera. Se retiró seis minutos después lesionado.
Luego su gol llegó en el segundo penal, también señalado con el VAR, que transformó el alemán Pascal Groß (90+3) en el último suspiro. (D)