Es una relación conveniente pero viscosa, a veces áspera, con reproches, que en ocasiones los sudamericanos no alcanzamos a entender. Hablamos de la integración del fútbol mexicano a los torneos de Conmebol. Unión que comenzó en la Copa América Ecuador ’93 y luego se fue extendiendo a los torneos de clubes. Parecía ser beneficiosa para ambos: los futbolistas mexicanos crecían deportivamente en su cruce con los nuestros y Sudamérica se favorecía con el ingreso de un mercado potente, inmenso, de 130 millones de personas, más otros 40 que residen en Estados Unidos, todos muy futboleros. Esto robustecía el valor de los derechos de televisión de la Libertadores y arrimaba patrocinios, incluso las taquillas mejoraban, pues México tiene una docena de clubes de renombre como América, Chivas, Cruz Azul, Tigres, Monterrey, Pumas, Toluca, Pachuca, Necaxa, León... Duró 24 años. Finalizada la Libertadores 2016 anunciaron que no seguirían jugando las copas de América del Sur porque, entre otras cosas, no podían compatibilizarlas con el calendario de su liga local.
“Pero a los cinco minutos de haberse ido ya hablaban de volver”, dice Marcelo Assaf, periodista argentino radicado hace dos décadas en la tierra del 'Chavo'. “Al hincha mexicano le encanta la Libertadores, que sus equipos compitan en ese ámbito, sobre todo contra argentinos y brasileños”, agrega Marcelo. “Son un poco quejosos, protestan de que en Sudamérica los perjudican, pero les encanta”, finaliza.
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La noticia surgió el lunes último: Enrique Bonilla, saliente presidente ejecutivo de la Liga Mexicana, buscará ahora como director de asuntos internacionales el regreso de México a las competencias sudamericanas. "Buscaré acelerar las conversaciones con Alejandro Domínguez, presidente de Conmebol, para que nuestros clubes compitan en las copas Libertadores y Sudamericana”, oficializó. No hay una fecha estimada de regreso, podría ser 2022 o 2023, pero si Bonilla arriesgó tal declaración es porque ve con optimismo su gestión.
¿Qué dicen los hinchas de nuestra región…? Hicimos una encuesta en nuestra cuenta de Twitter con la pregunta “¿Quieren que vuelvan los clubes mexicanos?”. Las consignas eran dos: 1) “Sí, enriquecen las copas” y 2) “No, ya estaban y se fueron solos”. Aunque el resultado no es contundente, triunfó la moción del retorno 52,8% a 47,2. Es un tema que al aficionado le interesa vivamente, se ha pronunciado en cantidad y con posiciones variadas. “Bienvenidos, los clubes mexicanos dan prestigio a la Libertadores. Hacen más lindo al torneo. Incluso podrían entrar los de la MLS”, dice Óscar Balbuena, de Perú. “No, que se queden con su Concachampions”, se opone Falquian.
Resultado final de la encuesta sobre el posible retorno de los clubes mexicanos a las copas sudamericanas. Muy parejo, pero en general los hinchas aprueban. pic.twitter.com/hhXzweVPYZ
— Jorge Barraza (@JorgeBarrazaOK) December 9, 2020
“Más complicada de lo que es ya no puede ser más; actualmente la Libertadores es un océano repleto de tiburones argentinos y brasileños. Los mexicanos serían tranquilos delfines”, grafica Andrés Yeroví. “Los viajes son muy largos para nuestros clubes, pero por nivel sería una buena adición”, opina Miguel M.M. “Una final de Libertadores en el Azteca sería fabuloso. También una Copa América en México”, se ilusiona Manuel Intriago. “¡Que buena noticia sería que volvieran…! Los equipos manitos son muy competitivos y ver a la Selección Mexicana participar en la Copa América sería extraordinario, la prefiero antes que a Catar y Australia”, señala Julián Moreno.
“Si no entramos a octavos ahora, imagínense con los mexicanos…”, se inquieta el colombiano Juan Felipe Arango. “No, porque ellos son sobrados y piensan que nos hacen un favor”, opina Hugo Jiménez, ecuatoriano. “Se llama Copa Libertadores de América, deberían participar de México y USA, más competitividad”, escribe Gonzalo Rey desde Estados Unidos. “El único interés de esto es mercantil”, critica Camilo Rueda, hincha del Independiente Santa Fe. “Por un lado motivaría más inversión en los clubes sudamericanos para poder competir, por retener jugadores que muchas veces van a México. Pero, la verdad, nunca me gustó la idea de que un club mexicano quede campeón en Sudamérica”, matiza un forista ambateño identificado como La Voz de la Hinchada.
“Ojalá se concrete, porque es un tipo de roce que le hace falta al jugador mexicano, te hace crecer individualmente y como equipo enfrentar a ese tipo de clubes”, señala Fernando Quirarte, exzaguero de las Chivas de Guadalajara y la Selección Mexicana, hoy panelista de Fox Sports. “Sería excelente que se pudiera solucionar el tema de los calendarios, lo económico y volver en materia de clubes y también a la Copa América”.
Nuestra opinión: desde el momento en que México pide reingresar a nuestros torneos está admitiendo el prestigio de la Libertadores y la Sudamericana. A su vez, estas competiciones se enriquecen con la incorporación de un fútbol de enorme tradición y arrastre popular, fuerte económicamente. Es beneficio mutuo. Desde luego, siempre que a México no se le asignen más cupos que a los países de nuestra región, y que su retorno no suponga quita de lugares para ninguno, en todo caso que se aumente el número de competidores (hoy son 47). Y que el reingreso signifique una mejora en las retribuciones. Sobre todo, para quienes deban viajar hacia el norte. Deberían asegurarles vuelos chárter. También habría que exigirles, por convenio, permanecer un mínimo de diez años y no que se retiren por un berrinche ocasional.
Que quede claro: la Libertadores fue un éxito extraordinario casi desde su mismo nacimiento en 1960, lo siguió siendo con los equipos aztecas y aún después que se fueron. El retorno de ellos debería ser aprobado por las diez federaciones de Conmebol. Porque no hay dudas de que la presencia de los mexicanos dificultará el acceso de muchos a las fases decisivas. Si ya es muy difícil para ciertos países, imaginemos si se agregan América, Cruz Azul, Tigres, Pachuca… Los clubes mexicanos manejan presupuestos altísimos y las posibilidades deportivas se achicarán para muchos. (O)