Los cambios suplementarios en caso de sospecha de un caso de conmoción tras un golpe en la cabeza se probarán en el fútbol a partir de enero de 2021, anunció el miércoles la International Board (IFAB), el organismo responsable de las reglas de este deporte.
El objetivo es evitar al jugador afectado un segundo golpe en el cráneo en el mismo partido, que podría tener "graves consecuencias" y a la vez evitar que su equipo sufra ningún perjuicio, explica la IFAB en un comunicado.
Después de meses de consultas, este sistema de reemplazos permanentes fue elegido frente a las sustituciones temporales, que habrían mantenido "una presión sobre el jugador para volver al partido", explicó en una conferencia telefónica David Elleray, director técnico de la IFAB.
Una sustitución definitiva en el partido permite tener el tiempo necesario "para evaluar bien" el estado de salud del jugador, señaló Elleray, ya que una conmoción cerebral puede producir efectos con retraso y ser inicialmente subestimada.
La idea es fijar una regla "aplicable a todos los niveles del fútbol" profesional o 'amateur', teniendo en cuenta que la mayoría de partidos "se disputan sin médico o personal formado médicamente", precisa la IFAB.
Este protocolo debía inicialmente ser probado durante el torneo olímpico de fútbol de los Juegos de Tokio, pero su aplazamiento por un año, de 2020 a 2021, ha obligado a replantear la situación. A partir de ahora, las confederaciones, federaciones y organizadores de las competiciones que opten por probarlo "deberán manifestarlo" ante la FIFA y la IFAB.
Las sustituciones temporales o definitivas se introdujeron ya en el rugby, pero las voces se multiplicaban para que estuvieran también en el fútbol, donde el impacto de las conmociones cerebrales es cada vez más comentado.
El martes, el exdefensa del Tottenham Jan Vertonghen reveló al medio belga Sporza que sufrió durante nueve meses secuelas de una conmoción que sufrió en la semifinales de la Liga de Campeones contra el Ajax Ámsterdam en 2019.
El año precedente, el arquero del Liverpool Loris Karius había recibido un codazo en la cabeza durante la final de la Liga de Campeones perdida ante el Real Madrid. Cometió dos fallos importantes e inhabituales en ese partido y después los médicos diagnosticaron el efecto sufrido en su cerebro por el golpe.
Las conmociones cerebrales pueden provocar síntomas a corto plazo (vértigos, dolor de cabeza, confusión, náuseas), pero también pueden estar detrás de enfermedades neurológicas precoces que han sido detectadas en exfutbolistas o exrugbiers después de su retirada. AFP